Se inauguró en La Rioja un sitio arqueológico en la localidad de Chilecito, que contó con la participación de diferentes funcionarios de la provincia, y cuyo acto central estuvo encabezado por el gobernador Ricardo Quintela. Se trata del Centro de Interpretación “Tamberías del Inca”, un edificio que pone en valor este importante sitio arqueológico y que recibirá a turistas, estudiantes e investigadores con una propuesta museológica avanzada.
Desde el ministerio de Turismo y Culturas de la provincia, manifestaron que esta inauguración "es la prueba acabada de que cuando se trabaja de manera colectiva, y se va en busca del rescate patrimonial, La Rioja tiene futuro”.
Por su lado, funcionarios de Turismo de Chilecito, señalaron que la inauguración de este Centro de Interpretación es un símbolo de la conservación del patrimonio de La Rioja y de las políticas públicas del territorio, que fueron incentivadas por el gobierno nacional anterior, con proyectos como el Plan 50 Destinos.
Al mismo tiempo, manifestaron que se pudo saldar una deuda pendiente que se tenía con toda la comunidad de Chilecito: “Desde 1930 hay recortes de diarios de reclamos del abandono de Tamberías del Inca, y cuando nosotros comenzamos con este trabajo el 16 de diciembre del 2019, era una promesa inconclusa, un problema de difícil solución”, recordaron los funcionarios.
Durante el acto central, los funcionarios pudieron manifestar de forma directa a Quintela su agradecimiento por la recuperación de las Tamberías del Inca: “Hoy esto es una realidad, una realidad que esperamos que genere mucho trabajo, que sea un ejemplo para la política nueva, y esperamos que encuentre en Chilecito la fortaleza para todas las batallas que le va a tocar enfrentar, porque todos lo vamos a acompañar en los destinos que usted marque para la provincia”.
Tamberías del Inca: en qué consiste
Durante el siglo XV, con la expansión del Imperio Incaico, se estableció en la ciudad de Chilecito un centro estratégico, logístico, administrativo y militar reconocido como “Tambería del Inca”. Este sitio es considerado el bastión más austral del imperio peruano y el más relevante en el actual territorio de la provincia de La Rioja. Sus instalaciones están ubicadas en un terreno de más de 16 hectáreas, con 35 conjuntos de construcciones dispersas, cercadas por un muro de 1,70 m de altura que los rodeaba, y que imponía una verdadera arquitectura de poder.
Uno de los hitos más interesantes ocupa el centro del sitio y se trata de una estructura conocida como la “Gran Plaza”: los arqueólogos infieren que se trata de un “Ushnu”, que eran las estructuras de carácter ceremonial más relevantes del incario, estrechamente relacionadas al funcionamiento político, administrativo y religioso del ordenamiento del imperio.
En la actualidad, además de la construcción de un portal y del Centro de Interpretación en dicho lugar, se llevará a cabo la puesta en valor del sitio arqueológico, con financiamiento nacional del programa 50 Destinos del Ministerio de Turismo y Deportes, junto con aportes del Gobierno provincial. La obra incluye un edificio para recibir no solo a turistas, sino también a estudiantes e investigadores, con una propuesta museológica de avanzada, y todos los servicios necesarios para un recorrido turístico de calidad. El proyecto que se viene desarrollando en este sitio arqueológico contempla, además, los futuros trabajos de restauración de tres estructuras arquitectónicas, y el dictado de talleres sobre el rescate y conservación del asentamiento inca de mayor importancia del NOA.
Centro de Interpretación
El Centro de Interpretación “Tamberías del Inca” inaugurado, se organiza en un edificio compuesto por un núcleo sanitario, que a su vez oficia de hito; y un espacio intermedio semicubierto, que resulta en el espacio de ingreso a las salas, las cuales conforman el largo volumen del edificio, y albergan las funciones propias del Centro de Interpretación. De manera longitudinal, se ordenan las salas de exposición, en donde se llevarán a cabo tanto muestras permanentes como temporales; y también se encuentra una sala que, eventualmente, funcionará como auditorio. Este edificio está, a su vez, atravesado por tres terrazas que permiten, de forma secuencial, definir una experiencia de interpretación del sitio. La explanada de acceso, por su parte, permite incorporar el edificio al paisaje.
Cabe destacar que las salas conforman una gran nave de uso flexible, dividida por tabiques que son, en sí mismos, espacios expositivos. Sus muros envolventes se han conformado como nichos, en los que se acomoda la mayoría de la exposición, liberando espacio en los centros de las salas y definiendo, así, un recorrido periférico y secuencial. Luego encontramos el espacio intermedio, que es el gran portal que da paso a la terraza, desde donde se expone a pleno no solo el paisaje sino también el sitio arqueológico, permitiendo contextualizar al visitante antes de ingresar a las salas, donde tendrá acceso a la información de las muestras. La distribución de los espacios del Centro de Interpretación permite tener una experiencia completa, desde la aproximación hasta el acceso mismo al sitio.
Para llevar a cabo este rescate y puesta en valor de las “Tamberías del Inca”, se trabajó con la colaboración de investigadores australianos y, gracias a las excavaciones que se realizaron, se detectaron algunas mesas ceremoniales desde donde los incas realizaban ceremonias en diferentes épocas del año. En los últimos días, se comenzó a trabajar en un muro perimetral que tiene 1.500 metros totales, y también se está desarrollando la cartelería que se colocará en el lugar para los visitantes. Posteriormente, se trabajará en torno a una plataforma ceremonial, que tiene una mirada hacia los dos santuarios de altura que tenían los incas, en la cima del final del Gran Oeste.