En el marco de las fiestas de fin de año, el Gobierno de La Rioja lleva a cabo la campaña de concientización para siniestros viales llamada "Bajá un cambio". Este proyecto busca reducir la cantidad de dinero destinada a las internaciones por accidentes de tránsito.
En este sentido, el Hospital Regional Enrique Vera Barros, ubicado en la capital provincial, es el principal nosocomio que brinda las primeras atenciones a las personas que sufren este tipo de accidentes. Ante ese escenario, desde el nosocomio se solicitó a la población tener una mayor responsabilidad civil para poder disminuir los costos de este tipo de cuidados.
El Vera Barros cuenta con 21 camas en el servicio de Terapia Intensiva, además de que un día de internación de un paciente cuesta 150 mil pesos solamente con el uso de cama y medicación, excluyendo la atención de un neurólogo o traumatólogo para una atención completa.
Bajo esta misma línea, en el mes de noviembre se informó un ingreso al servicio de trauma shock de 370 pacientes, de los cuales 13 presentaron cuadros de gravedad, 22 fueron derivados del interior provincial también por accidentes en la vía pública y cinco fallecieron.
Por otra parte, cabe aclarar que el tiempo de internación es de 12 días aproximadamente, lo que significa un costo de más de dos millones de pesos por persona internada, además de que el porcentaje de recuperación de las personas internadas por accidentes es muy bajo.
Bajá un cambio
La campaña "Bajá un Cambio", la cual se basa en intensos controles de tránsito de manera preventiva con distintas áreas de la policía. Estos controles se llevarán a cabo a partir de este jueves por la tarde y se extenderán hasta el lunes 25. Luego, los operativos se retomarán el jueves 28 de diciembre y se extenderán hasta el 1° de enero.
En estos operativos participarán las nueve comisarías que hay en la ciudad Capital y se sumarán además cuatro controles extra a cargo de la Dirección General de Seguridad Vial de la Policía de la Provincia. En este sentido, estos controles extras tendrán la característica de que serán itinerantes y sorpresivos mientras que los que realizará cada comisaría serán fijos.
Esta iniciativa se trata de una política pública de prevención del Gobierno provincial donde se trabajará también con distintas áreas provinciales. Los controles se llevarán a cabo a través de un trabajo conjunto entre la Policía de la Provincia y sus Direcciones y la Subsecretaría de Seguridad Vial, todas áreas dependientes del Ministerio de Seguridad, Justicia y Derechos Humanos.