Los grupos de la oposición siria respaldados por Turquía tomaron el control de la ciudad de Manbij, en el norte de Siria, de manos de las fuerzas kurdas sirias de las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS) respaldadas por Estados Unidos, dijo el lunes una fuente de seguridad turca, un día después de que los rebeldes declararan el derrocamiento del presidente sirio Bashar al-Asad.
En los últimos días, las Fuerzas Democráticas de Siria habían mantenido el control de la ciudad en medio de intensos combates con el Ejército Nacional Sirio y otros grupos respaldados por Turquía.
Los enfrentamientos en el norte continuaron mientras el mundo se veía sorprendido por los rápidos éxitos de la oposición en la toma inicial de Alepo y, el domingo, de la capital, Damasco, en el sur.
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La ofensiva relámpago duró menos de dos semanas, tras 13 años de guerra.
Un vídeo, verificado por Reuters, mostraba a las fuerzas de la oposición siendo recibidas por la gente en Manbij, que está a unos 30 kilómetros al sur de la frontera turca y al oeste del río Éufrates.
La agencia de noticias estatal turca Anadolu informó de que se está registrando la zona en busca de posibles minas terrestres y trampas dejadas por las milicias kurdas.
Las Fuerzas Democráticas de Siria son el principal aliado de la coalición estadounidense contra los milicianos del Estado Islámico. Turquía dice que está encabezada por un grupo terrorista estrechamente vinculado a los milicianos proscritos del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK, por sus siglas en kurdo) que han luchado contra el Estado turco durante 40 años.
Abdurrahman Mustafa, jefe del gobierno provisional de la oposición respaldado por Turquía, felicitó a las tropas que tomaron Manbij.
"Estamos con orgullo y honor con nuestras heroicas fuerzas y las apoyamos para completar la liberación de cada centímetro de nuestra tierra y lograr las aspiraciones de nuestro pueblo de libertad y dignidad", dijo Mustafa en una publicación en la red social X.
Estados Unidos dijo que mantendrá su presencia en el este de Siria, donde se concentran las FDS, y tomará las medidas necesarias para evitar un resurgimiento de Estado Islámico. Se estima que Estados Unidos tiene 900 soldados en el este de Siria como protección contra los milicianos de Estado Islámico.
Por otra parte, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, dijo que los ataques estadounidenses en Siria en los últimos días se centraron en las células de Estado Islámico para impedir que se aprovechen de las consecuencias de la rebelión.
(Información adicional de Timothy Kelly; escrito por Huseyin Hayatsever; edición de Ed Osmond y Jonathan Spicer; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)