Un alto tribunal de Rumanía ordenó el jueves un nuevo recuento de votos en la primera vuelta de las elecciones presidenciales, una decisión que, según los observadores, podría empañar la credibilidad de las instituciones del Estado antes de que se celebren otras dos votaciones.
El tribunal "ordenó por unanimidad la verificación y el recuento de los votos de las elecciones presidenciales del 24 de noviembre", dijo en un comunicado.
El político independiente de extrema derecha Calin Georgescu, de 62 años, que hasta la votación del domingo marcaba en las encuestas unos resultados de un solo dígito, se alzó con una victoria que suscitó dudas sobre cómo había sido posible tal sorpresa en este Estado miembro de la Unión Europea y la OTAN.
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La decisión se suma a la agitación que rodea el proceso electoral en Rumanía, que tiene previsto celebrar tres votaciones en la misma cantidad de semanas, cruciales para el rumbo de un país que ha sido prooccidental y firme aliado de Ucrania.
Georgescu ha elogiado anteriormente a políticos fascistas rumanos de los años 30 considerándolos héroes nacionales y mártires, ha criticado a la OTAN y a la asociación rumana con Ucrania y ha dicho que el país debería comprometerse con Rusia, no desafiarla.
Se enfrentará a la candidata centrista Elena Lasconi en una segunda vuelta el 8 de diciembre. Mientras tanto, las elecciones parlamentarias están previstas para el domingo.
En las elecciones se emitieron 9,46 millones de votos.
La decisión de solicitar un nuevo recuento se tomó después de que el candidato presidencial conservador Cristian Terhes, que obtuvo el 1% de los votos el domingo, impugnara el resultado del escrutinio.
Terhes ha pedido que el tribunal anule el resultado de las elecciones. El tribunal aplazó el fallo para el 29 de noviembre, pero también pidió el recuento.
El jefe de la autoridad electoral del país, Toni Grebla, dijo que una vez recibida la petición oficial se tardarían días en recontar los votos.
En octubre, el Tribunal Constitucional prohibió a un político de extrema derecha presentarse a las elecciones presidenciales en una sentencia que, según analistas, grupos de derechos civiles y algunos partidos, se extralimitaba en sus competencias.
Con información de Reuters
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