La alarma de déficit del Ministerio de Finanzas francés se suma al quebradero de cabeza de Macron

03 de septiembre, 2024 | 08.59

Francia podría ver su déficit presupuestario aumentar inesperadamente este año y el próximo si no se encuentran ahorros adicionales, advirtió el Ministerio de Finanzas en una carta a los legisladores, mientras la segunda mayor economía de la zona euro se tambalea más profundamente en la crisis política.

El deterioro de las finanzas, que también ha puesto a París en un procedimiento disciplinario de la UE, se suma a la presión sobre el presidente Emmanuel Macron en su lucha por nombrar un nuevo Gobierno dos meses después de las elecciones anticipadas que condujeron a un parlamento sin una mayoría clara.

El déficit financiero significa que cualquier nuevo Gobierno podría enfrentarse a decisiones difíciles entre recortar el gasto y subir los impuestos o perder credibilidad ante los socios de Francia en la UE y los mercados financieros.

Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

El documento enviado a los parlamentarios el lunes por el Ministerio de Finanzas indicaba que el déficit presupuestario del sector público corre el riesgo de alcanzar el 5,6% de la producción económica este año, dijo el legislador de izquierdas Eric Coquerel, que preside la comisión de finanzas de la Asamblea Nacional, en un mensaje publicado a última hora de la noche en la red social X. El Gobierno provisional se había fijado como objetivo un déficit del 5,1%.

El déficit podría llegar al 6,2% en 2025, añadió Coquerel, basándose en cálculos del Tesoro según los cuales serían necesarios 60.000 millones de euros de ahorro presupuestario para alcanzar el objetivo de déficit del 4,1% fijado por el Gobierno saliente para el año próximo.

Varios impuestos clave, como el de la renta, el de sociedades y el impuesto sobre el valor añadido, se situaron por debajo de las previsiones. La crisis de seguridad en la isla francesa de Nueva Caledonia, en el Pacífico, y las elecciones legislativas anticipadas de este año provocaron gastos adicionales, añadió.

El ministro saliente de Finanzas, Bruno Le Maire, dijo que era una "necesidad absoluta" que Francia siguiera adelante con los recortes presupuestarios y no dejara que el déficit se descontrolara, según uno de los documentos enviados a los parlamentarios al que tuvo acceso Reuters.

Coquerel contraatacó, diciendo a los periodistas que la situación era el resultado de sucesivos recortes de impuestos bajo Macron y que sólo podría corregirse con subidas de impuestos en lugar de recortes de gastos.

Con una previsión de crecimiento económico del 1% tanto para este año como para el próximo, Le Maire dijo que ya se habían congelado 16.500 millones de euros en gastos para este año para contrarrestar el déficit de ingresos y los excesos presupuestarios.

"Tenemos que poner fin a esta política de contar siempre con recortes del gasto", replicó Coquerel.

Francia lleva mucho tiempo incumpliendo las normas de la UE que obligan a los Estados miembros a mantener el déficit presupuestario por debajo del 3% de la producción económica y París no ha registrado superávit desde 1974, tres años antes de que naciera Macron. Su deuda total del 110% del PIB también viola las normas de la UE.

Bajo Macron, los recortes fiscales a los hogares, las empresas y las rentas del capital han reducido los ingresos anuales en decenas de miles de millones de euros.

El Gobierno provisional ya congeló el mes pasado el gasto de 2025 a los niveles actuales en su planificación presupuestaria provisional, aunque es probable que su sucesor reelabore las cifras, posiblemente de forma drástica.

Macron se está encontrando con dificultades para encontrar un primer ministro que sea compatible tanto con los izquierdistas como con los conservadores en el Parlamento y que no haga retroceder las reformas proempresariales que ha puesto en marcha desde que fue elegido por primera vez en 2017.

Si los partidos de la oposición no están satisfechos con la elección de Macron, podrían votar una moción de censura, lo que podría hacer caer el Gobierno del nuevo primer ministro.

Sin embargo, el tiempo apremia, ya que el Gobierno debe entregar por ley un proyecto de presupuesto a los parlamentarios para que lo examinen antes del 2 de octubre, aunque podría haber margen de maniobra para un par de semanas más.

(1 dólar = 0,9033 euros)

Con información de Reuters