El gobernador Ricardo Quintela, estuvo presente en los actos conmemorativos de los 208 años de la Expedición Zelada, Dávila y Larrahona realizados en el municipio de Copiapó en Chile. Este evento reunió a representantes de ambos países de la cordillera para recordar dichos hitos históricos y fundantes del cruce sanmartiniano hacia el país vecino.
En diálogo con la prensa trasandina, el gobernador riojano destacó la participación de Larrahona, quien condujo a los ejércitos de Argentina y Chile hacia la victoria. Asimismo, agradeció a las autoridades del municipio Copiapó por la organización del evento y la construcción de la memoria de países hermanos.
"Estoy contento y agradecido de participar en este aniversario, ya que tanto el pueblo chileno como el argentino compartimos los mismos principios y valores. La cordillera nos une, no nos divide; somos pueblos hermanos", destacó Quintela a minutos de finalizar el acto en la ciudad andina. Del mismo modo reconoció puntos en común entre los dos países para fomentar el federalismo: "Queremos que el norte argentino tenga las mismas oportunidades que el centro y la pampa húmeda. Un país solidario es aquel donde todos nos sentimos argentinos y todos se sienten chilenos en su patria".
Frente al diálogo actual entre las dos ciudades trasandinas, uno de los ejes uno de los ejes de sus declaraciones fue la necesidad de tener una mayor comunicación que potencie el desarrollo económico. De este modo, destacaron la importancia de los 25 kilómetros de asfalto por el paso fronterizo entre Chile y Argentina, llamado Pircas Negras. También problematizaron la situación actual de la quebrada de La Troya que, con sus obras correspondientes, podría habilitar el tránsito de hasta 300 camiones diarios. Esta inversión aumentaría el comercio entre las partes y permitiría el crecimiento económico en el norte de los dos países.
En la misma línea, el mandatario provincial volvió a poner en agenda la importancia de la minería sustentable que “ha sido aceptada por la población a partir de su potencial para el crecimiento y desarrollo”.
En los últimos años la provincia riojana se posicionó como una gran productora de aceitunas en América que potencia no solo la comercialización de las mismas, sino la producción de aceite de oliva. Además su economía también se nutre de la exportación de vinos, y de alfalfa, y se encuentra ensayando cultivos de cítricos y frutos de carozo.
La cordillera como la unión entre dos países
Tras finalizar el acto, el alcalde de Copiapó, Maglio Cicardini Neyra, dialogó con la prensa y subrayó la importancia de reconocer “que la historia une a los pueblos”. "La cordillera de los Andes no es un cordón montañoso que nos divide, sino un cordón umbilical que nos une como pueblos hermanos", resaltó el funcionario chileno.
Cicardini Neyra manifestó la deuda que los chilenos tienen con los argentinos, bajo el mando de los oficiales Dávila y Zelada, arriesgaron sus vidas por la libertad de Chile. "Mientras yo esté al frente de esta querida comuna, jamás olvidaremos el arrojo y la valentía de estos riojanos, amantes de la libertad y la soberanía de los pueblos americanos”, enfatizó el alcalde.
"Hoy, en el siglo XXI, es más necesario que nunca fortalecer los lazos con nuestra hermana República Argentina. He estado trabajando durante más de 30 años en la búsqueda de una alianza estratégica con el noroeste argentino y otros países vecinos como Paraguay, Uruguay y el sur de Brasil. Argentina necesita de Chile y viceversa", reflexionó Cicardini Neyra. Fue así que el alcalde mencionó los convenios establecidos con el gobierno de La Rioja para que jóvenes de Copiapó puedan estudiar en universidades argentinas, como la Universidad de La Rioja y la Universidad de Catamarca. "Estamos comenzando a dialogar sobre ideas que podemos concretar a corto y mediano plazo". ¡Que viva Copiapó! ¡Que viva la región de Atacama! ¡Y que viva la provincia de La Rioja y Argentina!", concluyó el funcionario chileno.
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