El Gobierno español continúa con las tareas de vigilancia y retirada de pequeñas bolitas de plástico, "llamadas "pellets" vertidas al mar por un buque de carga, en un incidente ocurrido en el último mes de diciembre, "que están inundando quince playas de la comunidad autónoma de Cantabria", informaron hoy las autoridades locales.
"Por el momento su presencia es poco significativa, afectando a unos nueve municipios de la costa de la ciudad de Santander", detallaron voceros de la comunidad norteña.
"Los -pellets-, o pequeñas bolitas blancas, de unos 5 milímetros de diámetro, se amontonan desde hace días en las playas de la región de Galicia, desde que cayeran al mar de seis contenedores de un barco de bandera de Liberia, que hacía la ruta entre los puertos de Algeciras, España, y Róterdam, en los Países Bajos", consignó la agencia Europa Press.
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Según la empresa de transporte marítimo Maersk, propietario de los contenedores, uno de ellos "contenía bolsas de gránulos de plástico, usados principalmente para producir botellas".
En tanto en Galicia, región que recuerda la marea negra provocada en 2002 por el hundimiento del petrolero Prestige, los voluntarios trabajan desde hace varios días con tamices o coladores para limpiar las playas de los millones de "pellets".
"Cantabria continúa con el operativo, y se revisaron 29 arenales desde que el gobierno regional puso en marcha el dispositivo de vigilancia, con 25 operarios en labores de limpieza, al que se sumaron efectivos del Ministerio y un dron, a pedido del Ejecutivo autonómico al Gobierno central", amplió el reporte oficial.
El dispositivo está compuesto por 25 operarios y 7 vehículos trabajando en playas de La Riberuca, en el municipio de Suances, Langre (Ribamontán), Berria (Santoña), Oriñón (Castro) y Valdearenas (Piélagos).
La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, acompañó durante parte de este sábado a los operarios que trabajan en la limpieza de Valdearenas.
"El Gobierno de Cantabria mantendrá, durante todo el fin de semana, ese operativo en coordinación con las administraciones públicas, para garantizar una respuesta rápida en la gestión, según la situación y en comunicación con el resto de comunidades autónomas afectadas", se detalló.
Asimismo, una estimación realizada para la Comisión Europea, cada año llegan al medio ambiente europeo hasta 167.000 toneladas de estas "microperlas de plástico", también llamadas "lágrimas de sirena".
Con información de Télam
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