La oficina de derechos humanos de la ONU pidió el martes el fin de la violencia con la que, según dijo, las fuerzas de seguridad israelíes y los colonos judíos han matado a más de 500 palestinos en Cisjordania desde el comienzo de la guerra entre Israel y Hamás en Gaza.
La organización afirmó en un comunicado que Israel había hecho un uso "innecesario y desproporcionado" de la fuerza en Cisjordania, ocupada por Israel, y condenó lo que calificó de denegación sistemática de ayuda médica.
Las Fuerzas de Defensa de Israel no respondieron inmediatamente a una solicitud de comentarios sobre la declaración de la ONU.
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La violencia ha aumentado en Cisjordania desde el ataque dirigido por Hamás contra Israel el 7 de octubre del año pasado, que desencadenó la ofensiva militar israelí en la Franja de Gaza, en la que, según el Ministerio de Sanidad de Gaza, han muerto más de 36.000 palestinos.
En los últimos meses, las fuerzas de seguridad israelíes han tomado medidas enérgicas en Cisjordania, que los palestinos quieren como núcleo de un futuro Estado independiente junto con Gaza, y han realizado miles de detenciones.
Representantes israelíes han dicho anteriormente que están actuando para evitar una inflamación de la violencia de larga duración en Cisjordania, incluso por parte de milicianos de Hamás, y para prevenir ataques contra Israel.
Los observadores de derechos humanos de la ONU estudiaron a fondo 80 casos entre las 505 muertes documentadas de palestinos en Cisjordania desde el ataque del 7 de octubre, en el que Israel dijo que murieron unas 1.200 personas y unas 250 fueron secuestradas.
Los casos estudiados mostraban "violaciones constantes de la legislación internacional de derechos humanos sobre el uso de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad israelíes mediante un uso innecesario y desproporcionado de la fuerza letal y un aumento de los homicidios selectivos aparentemente planificados", declaró Volker Turk, alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
En el mismo periodo, 24 israelíes murieron en enfrentamientos o presuntos ataques de palestinos de Cisjordania, según el comunicado de la ONU.
IMPUNIDAD GENERALIZADA
Algunos de los palestinos muertos en Cisjordania eran niños armados con piedras o petardos y "claramente no representaban una amenaza inminente para la vida", añadió.
El informe no precisó cuántos palestinos habían muerto en Cisjordania a manos de colonos y cuántos a manos de las fuerzas israelíes.
El elevado número de personas que murieron tras recibir disparos en la parte superior del cuerpo, junto con la denegación de asistencia médica a los heridos, sugería una intención de matar, afirmaba.
"La impunidad generalizada de estos crímenes ha sido habitual durante demasiado tiempo en Cisjordania ocupada. Esta impunidad ha creado un entorno propicio para que las fuerzas de seguridad israelíes cometan cada vez más homicidios ilegítimos", afirmó Turk.
Hamás dirige Gaza y se opone a la coexistencia con Israel. La Autoridad Palestina ejerce un autogobierno limitado en Cisjordania.
La violencia de los colonos preocupa cada vez más a los aliados occidentales de Israel. Varios países, entre ellos Estados Unidos, han impuesto sanciones a los colonos violentos y han instado a Israel a hacer más para detener la violencia.
Con información de Reuters
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