Familias huyen ante más órdenes israelíes de evacuar en Gaza y mengua la esperanza de alto el fuego

26 de agosto, 2024 | 06.36

Israel emitió nuevas órdenes de evacuación en Deir al-Balah, en el centro de la Franja de Gaza, a última hora del domingo, obligando a huir a más familias, al afirmar que las fuerzas pretendían actuar contra el grupo miliciano Hamás y otros que operan en la zona.

En los últimos días, Israel ha emitido en toda Gaza la mayor cantidad de órdenes de evacuación desde el comienzo de esta guerra de 10 meses, lo que ha provocado la protesta de responsables palestinos, de Naciones Unidas y de ayuda humanitaria por la reducción de zonas humanitarias y la ausencia de áreas seguras.

El municipio de Deir al-Balah afirma que las órdenes de evacuación israelíes han desplazado hasta ahora a 250.000 personas.

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Los ataques militares israelíes mataron al menos a siete palestinos el lunes, según los médicos. Dos murieron en Deir al-Balah, donde se refugiaban alrededor de un millón de personas, dos en una escuela del campo de al-Nuseirat y tres en la ciudad meridional de Ráfah, cerca de la frontera con Egipto.

Las nuevas órdenes obligaron a muchas familias y pacientes a abandonar el hospital al-Aqsa, el principal centro médico de Deir al-Balah, donde se habían refugiado cientos de miles de residentes y desplazados, por miedo a los bombardeos.

El hospital está cerca de la zona cubierta por el aviso de evacuación.

Médicos Sin Fronteras (MSF) dijo en un comunicado en la red social X el domingo por la noche que una explosión a unos 250 metros del Hospital al-Aqsa, apoyado por MSF, desató el pánico.

"Como resultado, MSF está considerando si suspender el cuidado de heridas por el momento, mientras trata de mantener el tratamiento para salvar vidas".

De alrededor de 650 pacientes, sólo 100 permanecen en el hospital, con siete en la unidad de cuidados intensivos, dijo, basándose en la información de al Ministerio de Salud de Gaza.

"Esta situación es inaceptable. Al Aqsa lleva semanas funcionando por encima de su capacidad debido a la falta de alternativas para los pacientes. Todas las partes beligerantes deben respetar el hospital, así como el acceso de los pacientes a la atención médica", añadió.

ESTANCAMIENTO DIPLOMÁTICO

Sawasn Abu Afesh dijo que ella y sus hijos habían sido desplazados 11 veces.

"Dejé a la mitad de mis hijos cerca de mis muebles y ahora estoy con mis pequeños y mi hija, sólo Dios puede ayudarnos. (...) No tengo dinero para transporte, iré a pie a la zona 17 donde se aloja mi familia. Me llevé a mis hijos y tres se han quedado atrás. Ni idea de dónde", dijo la mujer.

La escalada se produce con pocas esperanzas de que se vislumbre el final de la guerra, ya que la diplomacia de los mediadores, Qatar, Egipto y Estados Unidos no ha logrado hasta ahora cerrar la brecha entre Israel y Hamás, cuyos líderes intercambiaron culpas sobre la responsabilidad de la falta de acuerdo.

Ni Hamás, ni Israel, aceptaron varios compromisos presentados por los mediadores en las conversaciones celebradas el domingo en El Cairo, según informaron dos fuentes de seguridad egipcias.

Un alto cargo estadounidense, sin embargo, describió las conversaciones como "constructivas", diciendo que se llevaron a cabo con el ánimo de todas las partes de alcanzar "un acuerdo final y aplicable".

Osama Hamdan, responsable de Hamás, dijo que el grupo rechazaba las nuevas condiciones impuestas por Israel durante las conversaciones, a las que el grupo no asistió, y añadió que los comentarios de Estados Unidos sobre un inminente acuerdo de alto el fuego eran falsos y tenían fines electorales.

El presidente estadounidense, Joe Biden, y su Gobierno se han enfrentado a crecientes protestas en Estados Unidos por la ayuda a Israel antes de las elecciones de noviembre.

Más de 40.000 palestinos han muerto en la guerra, según el Ministerio de Sanidad de Gaza. El abarrotado enclave ha quedado arrasado y la mayoría de sus 2,3 millones de habitantes se han visto desplazados en múltiples ocasiones y se enfrentan a una grave escasez de alimentos y medicinas, según las agencias humanitarias.

La guerra se desencadenó tras el ataque de Hamás a Israel el 7 de octubre, en el que murieron 1.200 personas, según cálculos israelíes, y más de 250 fueron tomadas como rehenes.

(Información y redacción de Nidal al-Mughrabi; información adicional de Ramadan Abed en Gaza; edición de Sharon Singleton; editado en español por Anxo Fariñas Torres)