Un ataque con misiles rusos causó el lunes 10 muertos y 44 heridos en el puerto de Odesa, en la costa ucraniana del mar Negro, según informaron el gobernador local, Oleh Kiper, y la policía ucraniana.
Entre los heridos había cuatro niños, mientras que tres personas se encontraban en estado grave, dijo Kiper en el servicio de mensajería Telegram.
El presidente Volodímir Zelenski dijo en Telegram que un misil balístico ruso había impactado en un barrio residencial y que un edificio de apartamentos, un edificio universitario y un edificio administrativo habían resultado dañados.
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"No se trata de ataques aleatorios, sino de ataques espectáculo. Después de las llamadas y reuniones con Putin, después de todos los falsos rumores en los medios de comunicación sobre la supuesta 'abstención' de lanzar ataques. Rusia está demostrando lo que realmente le interesa: solo la guerra", afirmó.
La policía de Ucrania dijo que habían muerto siete agentes, un médico y dos residentes y que entre los heridos había otros 14 policías.
Rusia desencadenó el domingo su mayor ataque nocturno con misiles contra Ucrania en casi tres meses, en el que mató a siete personas y perjudicó aún más un sistema energético ya dañado.
Más tarde, un misil ruso alcanzó un edificio residencial en la región de Sumy, causando 11 muertos, entre ellos dos niños, y 89 heridos.
Con información de Reuters
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