Ahora bien, la elección de la utilización de nafta o diésel depende de varios factores, tales como el precio y el auto que posee cada persona. En esta nota conocerás en qué situaciones te conviene utilizar una y en cuales otra.
¿Qué es mejor: diésel o nafta?
Como se mencionó anteriormente, existen diferencias entre el diésel y la nafta, por lo cual es necesario saber cuándo conviene utilizar una u otra.
Al momento de adquirir un coche diésel, hay que tener en cuenta los siguientes factores:
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Genera menor consumo de combustible y tiene más autonomía, por lo que podría recorrer más kilómetros que un coche naftero.
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El cambio de aceite es otro punto importante en los vehículos diésel, ya que su renovación se realiza a partir de los 20.000 kilómetros.
Por otro lado, el mismo cambio de aceite en un auto a nafta hay que hacerlo a los 10.000 kilómetros, lo cual le brinda una ventaja al diésel. Además, el diésel suele ser más barato que la nafta.
En cuanto a los aspectos a analizar antes de comprar un vehículo a nafta, es importante conocer estos datos:
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Con respecto a la limpieza, el auto a nafta es predominante. Un auto con motor a nafta requiere mucho menos mantenimiento para estar limpio, algo sumamente distinto a lo que sucede con los autos diésel.
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En lo que se refiere al mantenimiento, el coche a nafta es más barato debido a la arquitectura y algunas partes de este tipo de motores. La reparación de los mismos es más económica que la de los motores diésel.
¿Cuál es la diferencia entre nafta y gasoil?
Hay distintas razones por las que cada persona puede tomar la decisión de adquirir un coche que tenga un sistema de diésel o nafta.
Una de ellas es el consumo: los vehículos con funcionamiento diésel se pueden desplazar con bajas revoluciones por minutos, algo muy diferente a lo que sucede en los autos nafteros. Estos últimos precisan de un mayor número de revoluciones para poder movilizarse y tiene como resultado un mayor gasto del combustible.
Los coches con diésel generan más ruidos por la compresión que se genera en su motor y pistones. Por su parte, en los vehículos nafteros no se observa este inconveniente gracias a la arquitectura del motor.
El tiempo de reparación de los autos es un tema importante porque uno que posee un sistema diésel tendrá menos reparaciones durante su vida útil, pero sus piezas de repuesto son más costosas. En cambio, un auto naftero seguramente requiera de más reparaciones, pero cuenta con la ventaja de que sus repuestos son mucho más económicos.
El coche a nafta tiene bujías porque el motor funciona por explosión, a través de la chispa que genera la bujía sobre el combustible pulverizado en la cámara de combustión. Por su parte, el diésel no necesita de ese componente eléctrico, ya que la explosión sucede por la compresión y temperatura interna. En la actualidad, esta tecnología se encuentra muy avanzada y logran una relación de compresión más elevada que la de los nafteros porque son turbinados y utilizan un sistema de inyección directa de combustible.
Asimismo, el motor diésel tiene mayor duración porque su vida útil es más larga que los coches que funcionan a nafta. Aunque el mantenimiento puede ser más caro por la complejidad tecnológica de ciertas piezas, no posee componentes eléctricos que tengan que ser reemplazados en períodos cortos. Por lo tanto, los servicios más frecuentes suelen ser el cambio de aceite y de filtros.
Ahora que conoces todas las diferencias entre usar nafta o diésel, solo resta que escojas el tipo de auto que más se adapte a ti, tu estilo de vida y tus necesidades.