El actor estadounidense James Earl Jones, que superó una tartamudez infantil para desarrollar una voz estentórea reconocida en todo el mundo como el villano intergaláctico Darth Vader y una imponente presencia en el escenario y la pantalla, murió el lunes a los 93 años, dijo su agente.
Jones, que padecía diabetes desde hacía tiempo, murió en su casa rodeado de familiares, dijo su agente Barry McPherson. No se dio a conocer la causa del fallecimiento.
Jones tenía una gran presencia física en los escenarios y la televisión, así como en el cine, pero habría sido una estrella aunque nunca se le hubiera visto la cara porque su voz tenía una carrera propia.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Sus graves resonantes podían infundir respeto al instante, como el sabio padre Mufasa en "El Rey León" y muchos papeles de Shakespeare, o infundir miedo como el Darth Vader en las películas de "La Guerra de las Galaxias".
Jones se rió cuando un entrevistador de la BBC le preguntó si le molestaba estar tan vinculado a Darth Vader, un papel que sólo requería su voz para unas pocas líneas, mientras que otro actor hacía el trabajo en pantalla disfrazado.
"Me encanta formar parte de todo ese mito, de todo ese culto", dijo, añadiendo que estaba encantado de complacer a los fans que le pedían que recitara la frase "Yo soy tu padre".
Jones dijo que nunca ganó mucho dinero con el papel de Darth Vader -sólo 9.000 dólares por la primera película- y que lo consideraba simplemente un trabajo de efectos especiales. Ni siquiera pidió aparecer en los créditos de las dos primeras películas de "La guerra de las galaxias".
Su larga lista de premios incluye Tonys por «The Great White Hope» en 1969 y «Fences» en 1987 en Broadway y Emmys en 1991 por «Gabriel's Fire» y «Heat Wave» en televisión. También ganó un Grammy al mejor álbum hablado, «Great American Documents», en 1977.
Aunque nunca ganó un premio competitivo de la Academia, fue nominado a mejor actor por la versión cinematográfica de «The Great White Hope» y recibió un Oscar honorífico en 2011.
(Editado en español por Javier Leira)