El asesinato de comandantes de Hezbolá no pondrá al grupo de rodillas, dijo el miércoles el líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, después de que Israel golpeara a figuras de alto rango del movimiento respaldado por Irán durante días de devastadores ataques aéreos en todo Líbano.
"La fuerza organizativa y los recursos humanos de Hezbolá son muy sólidos y no se verán gravemente afectados por la muerte de un alto mando, aunque ello suponga claramente una pérdida", dijo Jamenei.
La nueva ofensiva de Israel contra Hezbolá ha matado a 569 personas desde el lunes, según el ministro de Sanidad libanés. El ataque más mortífero contra Líbano en casi dos décadas se produce tras casi un año de guerra entre Israel y el grupo miliciano palestino Hamás en Gaza.
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La "resistencia palestina y libanesa obtendrá la victoria final", dijo Jamenei, acusando a Israel de matar a civiles por ser incapaz de derrotar a sus enemigos.
Irán ha sido aliado de Hezbolá desde la creación del grupo armado libanés en 1982.
Jamenei culpó a Washington de la escalada en el Líbano, que se produce tras los ataques de la semana pasada en los que estallaron buscapersonas y "walkie-talkies" distribuidos por Hezbolá.
A pesar de las afirmaciones de Washington de que no conocía de antemano los planes israelíes, "Estados Unidos sabe e interfiere", dijo Jamenei, que añadió que el Gobierno del presidente Joe Biden "necesita una victoria del régimen sionista" antes de las elecciones presidenciales de noviembre.
Con información de Reuters
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