Los ataques militares israelíes causaron la muerte de al menos 40 palestinos en toda la Franja de Gaza el martes, mientras las fuerzas israelíes estrechaban el cerco en torno a Jabalia, en el norte del enclave, en un escenario de encarnizados combates con combatientes dirigidos por Hamás.
Las autoridades sanitarias palestinas dijeron que al menos 11 personas murieron por fuego israelí cerca de al-Falouja, en Jabalia, el mayor de los ocho campos de refugiados históricos de Gaza, mientras que otras 10 murieron en Bani Suhaila, en el este de Jan Yunis, en el sur, cuando un misil israelí alcanzó una casa.
Previamente el martes, un ataque aéreo israelí destruyó tres casas en el suburbio de Sabra, en la ciudad de Gaza, y el servicio civil de emergencias local dijo haber recuperado dos cadáveres del lugar, mientras continuaba la búsqueda de otras 12 personas que se cree estaban en las casas en el momento del ataque.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Otras cinco personas murieron al ser alcanzada una casa en el campo de Nuseirat, en el centro de Gaza.
Jabalia lleva más de 10 días siendo objeto de una ofensiva israelí, en la que los soldados han regresado a zonas del norte que fueron objeto de intensos bombardeos en los primeros meses de la guerra de un año de duración.
La operación ha hecho temer a los palestinos y a las agencias de la Organización de las Naciones Unidas que Israel quiera expulsar a los residentes del norte del abarrotado enclave, acusación que ha negado.
La oficina de derechos humanos de Naciones Unidas dijo el martes que el ejército israelí parecía estar "aislando completamente el norte de Gaza del resto de la Franja de Gaza".
"En un contexto de intensas hostilidades en curso y de las órdenes de evacuación en el norte de Gaza, las familias se enfrentan a un miedo inimaginable, a la pérdida de seres queridos, a la confusión y al agotamiento. La gente debe poder huir de forma segura, sin enfrentarse a más peligros", dijo en un comunicado Adrian Zimmerman, jefe de la subdelegación del Comité Internacional de la Cruz Roja en Gaza.
"Muchos, incluidos los enfermos y los discapacitados, no pueden marcharse, y siguen estando protegidos por el derecho internacional humanitario; deben tomarse todas las precauciones posibles para garantizar que permanezcan ilesos. Toda persona desplazada tiene derecho a regresar a su hogar en condiciones de seguridad", añadió.
El ejército israelí ha rodeado el campamento de Jabalia y ha enviado tanques a las ciudades cercanas de Beit Lahiya y Beit Hanún, con el objetivo declarado de acabar con los combatientes de Hamás que intentan reagruparse allí.
El ejército israelí ha ordenado a los residentes que abandonen sus hogares y se pongan a salvo en el sur de Gaza. Las autoridades palestinas y de la ONU afirman que no hay ningún lugar seguro en Gaza.
Los portavoces israelíes afirmaron que las órdenes de evacuación tenían como objetivo separar a los combatientes de Hamás de los civiles y negaron que existiera un plan sistemático para expulsar a los civiles de Jabalia o de otras zonas del norte.
El brazo armado de Hamás afirmó que los combatientes estaban librando encarnizados combates con las fuerzas israelíes en Jabalia y sus alrededores.
Zimmerman también instó a que se protegieran las instalaciones sanitarias del norte, afirmando que los hospitales de la zona tenían dificultades para prestar servicios médicos.
El Ministerio de Sanidad de Gaza dijo que el ejército había ordenado la evacuación de los tres hospitales que operaban allí, pero el personal médico afirmó que estaban decididos a seguir prestando sus servicios aunque se vieran desbordados por el creciente número de víctimas.
El lunes, el secretario general de la ONU, António Guterres, condenó el nivel de víctimas civiles en el norte de Gaza.
En el norte de Gaza vive más de la mitad de los 2,3 millones de habitantes del territorio y cientos de miles de residentes se vieron obligados a huir de sus hogares ante los intensos bombardeos de la primera fase del asalto israelí al territorio.
Alrededor de 400.000 personas permanecieron en el lugar, según estimaciones de Naciones Unidas.
Israel lanzó la ofensiva contra Hamás tras el ataque del grupo armado contra Israel el 7 de octubre, en el que murieron 1.200 personas y unas 250 fueron tomadas como rehenes en Gaza, según los recuentos israelíes. Más de 42.000 palestinos han muerto en la ofensiva hasta ahora, según las autoridades sanitarias de Gaza.
(Información y redacción de Nidal al-Mughrabi; edición de Sharon Singleton; edición en español de Mireia Merino)