Tanques israelíes penetraron el miércoles en el norte de la zona de Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza, y el personal médico palestino afirmó que los ataques aéreos israelíes habían matado al menos a 20 personas en todo el enclave.
Los residentes dijeron que los tanques avanzaron un día después de que el ejército israelí emitiera nuevas órdenes de evacuación, alegando que se habían producido lanzamientos de cohetes desde la zona.
Ante la caída de proyectiles cerca de zonas residenciales, las familias abandonaron sus hogares y se dirigieron hacia el oeste, a la cercana zona humanitaria de al-Mawasi.
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Miembros del personal sanitario dijeron que 11 personas habían muerto en tres ataques aéreos contra zonas del centro de Gaza, entre ellas seis niños y un médico. Cinco de los muertos hacían cola frente a una panadería.
Otros nueve palestinos murieron por disparos de tanques en Ráfah, cerca de la frontera con Egipto, según el personal sanitario.
El ejército israelí no hizo comentarios inmediatos sobre las informaciones médicas.
Las fuerzas israelíes dispararon contra el hospital Kamal Adwan de Beit Lahiya, en el norte de Gaza, por quinto día consecutivo, según dijo el director del hospital, Hussam Abu Safiya, quien añadió que tres miembros de su personal médico habían resultado heridos, uno de ellos de gravedad, el martes por la noche.
"Los drones están lanzando bombas llenas de metralla que hieren y a cualquiera que se atreva a moverse", dijo Abu Safiya. "La situación es extremadamente urgente".
Los residentes de tres ciudades -Jabalia, Beit Lahiya y Beit Hanún- dijeron que las fuerzas israelíes habían volado decenas de casas.
Los ciudadanos palestinos afirman que el ejército israelí está intentando expulsar a la población del extremo norte de Gaza con evacuaciones forzosas y bombardeos para crear una zona de seguridad. El ejército israelí lo niega y afirma que ha regresado para impedir que los combatientes de Hamás se reagrupen en una zona de la que ya los había expulsado anteriormente.
Israel lanzó su campaña en el enclave densamente poblado después de que combatientes dirigidos por Hamás atacaran comunidades israelíes al otro lado de la frontera el 7 de octubre de 2023, matando a 1.200 personas y tomando más de 250 rehenes, según los recuentos israelíes.
Desde entonces, la campaña militar israelí ha matado a más de 44.400 palestinos, herido a muchos otros y reducido a escombros gran parte del enclave.
La semana pasada, Israel acordó un alto el fuego con el grupo armado libanés Hezbolá que puso fin a los combates en un conflicto que se ha desarrollado en Líbano en paralelo a la guerra de Gaza.
Pero la propia guerra de Gaza se ha prolongado durante más de un año, con un único alto el fuego que duró una semana.
(Información y redacción de Nidal al-Mughrabi, edición de Timothy Heritage; edición en español de Mireia Merino)
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