La administración Biden endurecerá la prohibición de asilo en la frontera entre Estados Unidos y México para mantenerla en vigor durante más tiempo, según informaron el lunes funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional estadounidenses, lo que indica su deseo de frenar aún más los cruces ilegales.
El cambio, efectivo justo después de la medianoche, dejará las restricciones de asilo en vigor hasta que las detenciones de migrantes que cruzan ilegalmente caigan por debajo de una media diaria de 1.500 en 28 días, frente a los siete días actuales, dijo uno de los funcionarios en una llamada con periodistas.
El presidente Joe Biden, demócrata, decretó la prohibición de asilo en junio para reducir el número récord de inmigrantes que cruzan ilegalmente. La inmigración es uno de los principales problemas de los votantes de cara a las elecciones del 5 de noviembre, que enfrentan a la vicepresidenta Kamala Harris con el republicano Donald Trump, un partidario de la línea dura en la materia.
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Harris es favorable a que la prohibición sea aún más difícil de levantar, según informó Reuters la semana pasada, pero el gobierno de Biden no adoptó su propuesta.
Las autoridades fronterizas estadounidenses han detenido a unos 54.000 inmigrantes en lo que va de septiembre, una cifra muy inferior al máximo de 250.000 registrado en diciembre, según un funcionario del Departamento de Seguridad Nacional.
Una media diaria de 1.500 en 28 días representaría un total de 42.000 migrantes en ese periodo.
Como parte de los cambios en la prohibición de asilo, todos los niños no acompañados que sean sorprendidos cruzando ilegalmente serán contados en el recuento utilizado para decidir si las restricciones pueden ser levantadas. Anteriormente, sólo se contabilizaban los niños procedentes de México y Canadá.
El enfoque más estricto "garantiza que la disminución de los encuentros sea una disminución sostenida" y no esté vinculada a tendencias a corto plazo, dijo un funcionario del DHS, hablando bajo condición de anonimato.
Grupos de defensa de los derechos de los inmigrantes, encabezados por la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés), han demandado la prohibición de asilo, alegando que es contraria a la legislación estadounidense en materia de asilo y muy similar a una prohibición de Trump bloqueada en los tribunales.
Con información de Reuters