Varias decenas de fieles asistieron hoy a una misa en memoria de las víctimas del incendio de una sala de fiestas donde se celebraba una boda en Irak, que dejó un centenar de muertos y 150 heridos, en una ceremonia en la que convivían la ira y la tristeza.
El incendio, que destruyó el martes por la noche el predio en la localidad de Qaragosh, también conocida como Hamdaniyah, ubicada en el norte de Irak, a 51 kilómetros al sureste de Mosul, se desató en el medio de la fiesta a la que asistían unas 900 personas, según el ministerio del Interior.
Los retratos de las víctimas -hombres, mujeres y niños de todas las edades- estaban alineados hoy por la mañana en la iglesia católica siríaca de Al Tahira, donde se celebró la misa.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
En el interior del recinto, que recibió en marzo de 2021 una visita histórica del papa Francisco, la emoción se leía en los rostros de los fieles, algunos de los cuales no lograron contener sus lágrimas, según constató en el lugar la agencia de noticias AFP.
El primer ministro iraquí, Mohamed Shia Al Sudani, llegó el jueves por la mañana a la provincia de Nínive, donde se encuentra Qaraqosh, para dirigirse a "los heridos y las familias de las víctimas", según un comunicado.
Najiba Yuhana, una mujer de 55 años que participó de la misa, dijo que se trató de "una tragedia que nunca será olvidada" y enumeró los nombres de los familiares desaparecidos. "Es un dolor muy profundo; hay ira y una tristeza indescriptible e inigualable", añadió una vez fuera de la iglesia.
Los testimonios coinciden en que el incendio en la sala de fiestas de Qaraqosh se propagó a una velocidad asombrosa.
Además de un número insuficiente de salidas de emergencia, la Defensa Civil denunció la utilización en el emplazamiento de paneles prefabricados "altamente inflamables y contrarios a las normas de seguridad", que inmediatamente se incendiaron en contacto con "fuegos artificiales" de interior.
El portavoz del Ministerio del Interior, el general Saad Maan, informó a AFP que "se detuvo a nueve empleados" y que se "emitieron cuatro órdenes de arresto contra los dueños" de la sala de festejos.
Las autoridades anunciaron también la detención en la región autónomo de Kurdistán (norte) de tres de los cuatro propietarios de la sala.
En Irak, las normas de seguridad son poco respetadas, tanto en el sector de la construcción como en el del transporte.
El país, devastado por décadas de conflicto, mala gestión y corrupción, es regularmente escenario de incendios o accidentes domésticos mortales.
Con información de Télam