El gobernador de California, Gavin Newsom, destacó la importancia del comercio con México y de la mano de obra inmigrante en una rueda de prensa cerca de la frontera el jueves, marcando un contraste con la amenaza del presidente electo Donald Trump de aranceles y deportaciones masivas.
Newsom, demócrata, describió los aranceles del 25% que planea imponer el presidente electo a los productos procedentes de México y Canadá como un impuesto a los estadounidenses, que podrían ver incrementados los precios si el plan sigue adelante cuando Trump asuma el cargo el 20 de enero.
Trump ganó un segundo mandato el mes pasado prometiendo políticas comerciales proteccionistas en Estados Unidos y una amplia ofensiva contra la inmigración ilegal, al tiempo que apuntaba a los derechos de los transexuales y las iniciativas de diversidad. Newsom y el fiscal general de California, Rob Bonta, se han erigido en destacados opositores demócratas a la agenda de Trump, prometiendo defender las políticas liberales del estado.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Newsom calificó los planes arancelarios de Trump como "uno de los mayores aumentos de impuestos en la historia de Estados Unidos".
"No piensen ni por un segundo que esto no les impactará", dijo.
La portavoz de la transición de Trump, Karoline Leavitt, dijo que las políticas de Trump beneficiarían a los trabajadores estadounidenses y rechazó la sugerencia de Newsom de que los precios subirían.
"El presidente Trump ha prometido políticas arancelarias que protegen a los fabricantes estadounidenses y a los trabajadores y trabajadoras de las prácticas desleales de las empresas extranjeras y los mercados extranjeros", dijo Leavitt en un comunicado.
Newsom dijo que California estaba comprometida a avanzar en los planes para abrir un nuevo cruce fronterizo legal cerca de San Diego, un proyecto retrasado conocido como Otay Mesa East. Dijo que el estado trabajaría con el Gobierno del presidente saliente, Joe Biden, pero que se necesitaría el apoyo de Trump para completarlo a finales de 2027.
Newsom dijo que las tropas de la Guardia Nacional del estado desplegadas en la frontera buscarían dinero ilícito y armas que se dirigen a México, además de los esfuerzos en curso para detener el tráfico de fentanilo en Estados Unidos.
Los grupos agrícolas han dicho que los planes de Trump para las deportaciones récord podrían diezmar el suministro de alimentos de la nación si se extiende a los trabajadores agrícolas, una preocupación de la que Newsom se hizo eco.
"Los impactos de la deportación masiva en el costo de los alimentos en este estado, en esta nación, están fuera de los gráficos", dijo.
Con información de Reuters
Cerrar sesión