El legado de Freddie Mercury sigue vigente a pesar del paso de los años. Desde los años 70, el artista se convirtió en una de las estrellas más aclamadas y queridas por el público, y su popularidad se mantiene hasta el día de hoy. Además de su voz y carisma, su icónico bigote es una de las características más recordadas del cantante. Aunque el tiempo pase, su legado sigue vivo en el corazón de la gente, demostrando que su talento y carisma trascienden generaciones. Sin duda, Freddie Mercury es y será siempre una figura inolvidable en la historia de la música.
Sin embargo, lo que no todos conocen es que el icónico bigote del líder de Queen no siempre formó parte de su rostro. ¿Cuándo empezó a usarlo? Si nos remontamos a los primeros años de carrera de la banda, podemos observar que a comienzos de 1980, el artista optó por realizar un cambio de look. Desde entonces, el bigote se convirtió en una marca distintiva de Freddie Mercury. Asimismo, cabe destacar que este cambio no solo fue estético, sino que también coincidió con el éxito mundial de la banda y el lanzamiento de sus álbumes más populares. Sin duda, una decisión que marcó un antes y un después en la imagen del inolvidable cantante.
El 30 de mayo del mismo año, Queen hizo su presentación mundial del sencillo "Play de Game". Esta canción marcó un hito en la carrera de la banda al ser la primera vez que incorporaron un sintetizador en su música. Sin embargo, esto no fue lo único que causó revuelo, ya que el videoclip que lo acompañó también generó gran impacto en el público. Fue una apuesta musical arriesgada que logró cautivar a la audiencia y demostrar una vez más la versatilidad y creatividad de la banda. Sin duda, este lanzamiento fue un momento histórico en la trayectoria de Queen y sigue siendo recordado hasta el día de hoy.
El cambio en la apariencia física de Freddie Mercury se debió a una inspiración de los locales nocturnos del San Francisco de aquellos años. El cantante decidió cortarse el pelo y dejar de pintarse las uñas, lo cual no fue bien recibido por algunos de sus fans. Este cambio, que se produjo hace unos años, generó cierta polémica entre sus seguidores. Aunque el artista se mostraba contento con su nueva imagen, algunos no estaban conformes con esta transformación. Sin embargo, a pesar de las críticas, Mercury mantuvo su nueva apariencia y continuó deleitando al público con su talento musical. Hoy en día, este cambio es recordado como una etapa más en la carrera del icónico cantante.
Según la historia, numerosas personas habrían llevado cuchillas de afeitar para lanzárselas a Mercury durante sus presentaciones. A pesar de las críticas recibidas, él hizo caso omiso. En una ocasión, se dirigió a su público y preguntó: "¿Les agrada mi bigote, señoritas? ¿A ustedes, caballeros? A mucha gente le disgusta, pero a mí me importa poco. En realidad, es mi bigote y lo conservaré".
En cuanto a esto, los compañeros de banda del artista estuvieron de acuerdo con sus decisiones. Brian May, Roger Taylor y John Deacon eran conscientes de que esa era la forma en que Freddie Mercury se expresaba ante el mundo. En su momento, Taylor señaló: «Un hombre se deja crecer un bigote, no es para tanto». Por su parte, Deacon afirmó: «No nos molestó en absoluto, él podía hacer lo que quisiera». Los demás integrantes de la banda respetaron la decisión de Mercury y no tuvieron ninguna objeción al respecto.
Finalmente, el famoso bigote tan criticado se convirtió en una de las principales señas de identidad de la historia musical. Esta situación dejó en claro que el intérprete de We Will Rock You nunca renunciaría a su verdadera esencia ni dejaría de luchar por sus gustos y creencias. Su icónico bigote se ha convertido en un símbolo de su autenticidad y determinación, demostrando que siempre se mantuvo fiel a sí mismo. A pesar de las críticas, el artista se mantuvo firme en su postura y hoy en día su bigote es reconocido y admirado en todo el mundo. Esta es una muestra más de que nunca se debe juzgar a alguien por su apariencia, ya que detrás de ella puede haber una gran historia de éxito y superación.