Días después de orquestar la caída del gobierno francés, el partido ultraderechista Reagrupamiento Nacional (RN) de Marine Le Pen perdió un escaño en unas elecciones parciales celebradas en el noreste de Francia.
Los críticos de RN aprovecharon la estrecha derrota del domingo para calificarla como una señal de la condena de los votantes a la presión del partido la semana pasada para derrocar al gobierno de Michel Barnier por su proyecto de presupuesto para 2025.
No hubo comentarios inmediatos de RN, cuya votación en las Ardenas le dejó con 124 legisladores, el partido más grande aún en el Parlamento de 577 escaños.
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En un nuevo golpe para el RN, había indicios de que el próximo gobierno podría estar liderado por la izquierda, después de que el presidente Emmanuel Macron se reuniera el lunes con líderes izquierdistas mientras intenta nombrar con rapidez a un nuevo primer ministro.
En las elecciones parciales de las Ardenas, Lionel Vuibert -que se presentaba como independiente pero con estrechos vínculos con la coalición centrista de Macron- ganó el 50,9% de los votos en una segunda vuelta en el primer distrito electoral, donde la extrema derecha ha tenido tradicionalmente un fuerte apoyo. Vuibert había hecho campaña contra la moción de censura.
Jordan Duflot, del RN, que obtuvo el mayor número de votos en la primera vuelta y pidió la caída del gobierno durante la campaña para la segunda vuelta, obtuvo el 49,1%. La participación fue baja, en torno al 30%.
La "victoria" de Vuibert "es una señal fuerte" contra "los que quieren la censura, la inacción y el caos", escribió en la red social X Xavier Bertrand, político de centroderecha al que la prensa apunta como posible primer ministro.
El ex primer ministro Gabriel Attal felicitó a Vuibert por su "seriedad y proximidad" a los electores. "La atención a la vida cotidiana de los franceses prevalece sobre el caos deseado por Marine Le Pen y los extremos", escribió Attal en X.
Como muestra de la importancia del escaño para RN, el presidente del partido, Jordan Bardella, viajó al distrito antes de la votación para recabar apoyos para Duflot, pero no fue suficiente. Los comicios se convocaron tras la dimisión del titular de RN por motivos de salud no especificados.
La jugada de Le Pen de derribar el gobierno con la extrema izquierda era arriesgada, ya que amenaza con alienar a los conservadores moderados que necesita ganarse para su esperada cuarta carrera a la presidencia en 2027.
(Editado en español por Carlos Serrano)