Durante enero las ventas al exterior de vino riojano cayeron un 35,3% con respecto al mismo mes de 2023. En este sentido, la provincia exportó 2.656 hectolitros, y ese volumen vendido significó un ingreso de divisas por u$s 476.000.
Según los datos publicados en el informe mensual que elabora el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), en enero los despachos de vino riojano al exterior alcanzaron los 2.656 hectolitros (hl), mientras que en el mismo mes de 2023 la provincia había exportado 4.104 hl.
El informe del INV arrojó, además, que en enero Mendoza fue la principal exportadora del país con 129.508 hl comercializados mientras que San Juan se quedó con el segundo lugar de la lista con 3.405 hl. En tanto, La Rioja ocupó el tercer lugar con 2.656 hl exportados y luego aparece Salta con una venta al exterior de 1.524 hl.
Por otro lado, a nivel país en enero se exportaron vinos por un volumen de 138.196.000 hl, lo cual representa una baja del 11,2% en comparación con el mismo mes del año anterior. Esto se explica debido al golpe que recibió la economía a nivel nacional debido al ajuste del presidente Javier Milei.
La importancia del vino en la provincia
Uno de los principales atractivos de La Rioja es su enoturismo distribuido en toda la provincia, con su célebre cepa del torrontés riojano, emblema no solo de la provincia si no del país en general. Dentro del circuito turístico vitivinícola, se destaca la propuesta de la Bodega Familia Sacavino Arrieta, ubicada en Los Palacios, en el departamento de Florencio Varela.
La bodega de la familia Sacavino Arrieta está instalada en la finca Lilas y Blancas, frente a la precordillera y al río Bermejo, a metros de la ruta 40. Es un emprendimiento familiar que comenzó en el 2011, cuando se compró la finca. Al año siguiente, se empezó a plantar la viña y dieron comienzo a una etapa productiva, poniendo foco en la calidad de la uva blanca.
La propuesta que la Bodega Familia Sacavino Arrieta ofrece a sus visitantes es un recorrido por la finca de unas 3 horas, junto a los fundadores y propietarios, en donde también se incluye una degustación de empanadas criollas caseras, cocidas en horno de barro, acompañado de unas copas de su vino propio SUMALAO, un torrontés riojano seco, fresco y frutado.
Además del recorrido por sus instalaciones, la Bodega Familia Sacavino Arrieta también ofrece la estadía en su casa de huéspedes con piscina, que tiene unas vistas espectaculares al paisaje riojano.