La jefa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, comenzó el lunes a intentar formar una coalición después de que la extrema derecha ganara peso en las elecciones al Parlamento Europeo, lo que llevó al presidente francés, Emmanuel Macron, a convocar una votación nacional anticipada.
Un giro a la derecha dentro del Parlamento Europeo puede dificultar la aprobación de nueva legislación para responder a los retos de seguridad, el impacto del cambio climático o la competencia industrial de China y Estados Unidos.
Von der Leyen, presidenta alemana del poderoso órgano ejecutivo de la Unión Europea, salió reforzada de las elecciones celebradas el domingo en 27 países, ya que su Partido Popular Europeo (PPE), de centro-derecha, ganó escaños.
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Pero para asegurarse un segundo mandato de cinco años, Von der Leyen necesita el apoyo de la mayoría de los líderes nacionales de la UE y una mayoría operativa en el Parlamento Europeo.
Los resultados provisionales del lunes daban a los principales partidos que apoyaron a Von der Leyen la última vez -el PPE, los socialistas y los liberales- un total de 402 escaños en la cámara de 720 miembros.
Sin embargo, en Bruselas se considera una mayoría demasiado ajustada. Por ello, Von der Leyen podría acercarse a los Verdes, que sufrieron fuertes pérdidas, y a la primera ministra nacionalista italiana, Giorgia Meloni, con quien ha colaborado estrechamente.
A última hora de la noche del domingo, Von der Leyen dijo que empezaría por intentar reconstruir los cimientos parlamentarios de su última legislatura.
"He estado trabajando en la construcción de una amplia mayoría de fuerzas proeuropeas. Y por eso, a partir de mañana, tenderemos la mano a las grandes familias políticas con las que hemos formado la plataforma", dijo a la prensa en Bruselas.
Von der Leyen indicó que hablaría con otros tras esas consultas iniciales, manteniendo abiertas sus opciones.
OPCIONES ABIERTAS
Von der Leyen afirmó que su objetivo es trabajar con aquellos que son "proeuropeos, proucranianos y pro Estado de derecho", una descripción que ha dejado claro que cree que se aplica a los Hermanos de Italia de Meloni, pero no a otros partidos de extrema derecha.
Sin embargo, los socialistas, los liberales y los Verdes han declarado que no trabajarán con la extrema derecha, lo que hace extremadamente delicados los esfuerzos de Von der Leyen por formar coalición.
Meloni también mantuvo sus opciones abiertas el lunes, diciendo que era demasiado pronto para decidir sobre un segundo mandato de Von der Leyen.
Los partidos nacionalistas, populistas y escépticos con respecto a la UE van camino de obtener alrededor de una cuarta parte de los escaños de la asamblea de la UE.
Los analistas políticos atribuyen el giro general a la derecha al aumento del coste de la vida, la preocupación por la inmigración y el coste de la transición ecológica, así como a la guerra de Ucrania, preocupaciones que han aprovechado los partidos nacionalistas y populistas.
Sin embargo, el peso de estos partidos dependerá de su capacidad para superar sus diferencias. Actualmente, están divididos en dos familias políticas, y algunos partidos y parlamentarios se sitúan por ahora al margen de estas agrupaciones.
Según los resultados provisionales, el PPE obtendría 185 escaños, los socialistas 137 y los liberales 80.
MACRON Y SCHOLZ, HERIDOS
Las repercusiones de la votación se dejaron sentir mucho más allá de Bruselas.
En Francia, la ultraderechista Agrupación Nacional de Marine Le Pen obtuvo más del 31% de los votos, imponiéndose al partido centrista de Macron, Renacimiento, que solo obtuvo el 14,6%, y obligándole a convocar elecciones legislativas nacionales anticipadas.
En Alemania, la ultraderechista Alternativa para Alemania quedó segunda con el 15,9% de los votos, por delante de los socialdemócratas del canciller Olaf Scholz, que obtuvieron el 13,9% en su peor resultado histórico.
Meloni, en cambio, se vio favorecida por el primer puesto de su partido en Italia, con más del 28% de los votos.
En Polonia, la centrista Coalición Cívica del primer ministro Donald Tusk, miembro del PPE, fue primera. También en España, el Partido Popular de centro-derecha, también miembro del PPE, quedó en cabeza, superando al primer ministro socialista Pedro Sánchez.
El Parlamento Europeo codecide con los Gobiernos nacionales de la UE las leyes propuestas por la Comisión Europea para gobernar el bloque de 450 millones de personas.
(Reportajes de Philip Blenkinsop, Kate Abnett, Jan Strupczewski, Sudip Kar-Gupta en Bruselas, Belen Carreno, Graham Keeley en Madrid, Gus Trompiz, Manuel Ausloos, Michel Rose, Tassilo Hummel en París, Francois Murphy en Viena, Sarah Marsh y Thomas Escritt en Berlín, Stephanie Van den Berg en los Países Bajos; edición de Mark Heinrich; editado en español por Natalia Siniawski)