Los votantes de 21 países de la UE, entre ellos Francia y Alemania, acudieron el domingo a las urnas en unas elecciones al Parlamento Europeo que se espera que desplacen la asamblea hacia la derecha y aumenten el número de nacionalistas euroescépticos.
Las elecciones marcarán la forma en que la Unión Europea, un bloque de 450 millones de ciudadanos, afronte retos como una Rusia hostil, la creciente rivalidad industrial de China y Estados Unidos, el cambio climático y la inmigración.
La votación comenzó el jueves en los Países Bajos y en otros países el viernes y el sábado, pero el grueso de los votos de la UE se emitirá el domingo, con Francia, Alemania, Polonia y España abriendo las urnas e Italia celebrando un segundo día de votación.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Al depositar su voto, la candidata del Partido Popular de España, Dolors Montserrat, afirmó que en las elecciones se juegan "el futuro de España en Europa y el futuro de Europa".
El Partido Popular Europeo (PPE), de centro-derecha, seguirá siendo, según las encuestas, el grupo más numeroso del Parlamento Europeo, lo que sitúa a su candidata a la Comisión Europea, la alemana Ursula von der Leyen, en primera posición para un segundo mandato.
Sin embargo, podría necesitar el apoyo de algunos nacionalistas de derechas, como los Hermanos de Italia de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, para asegurarse la mayoría parlamentaria, lo que daría a Meloni y sus aliados más influencia.
El Parlamento en su conjunto también votará y a menudo modificará una serie de leyes previstas para los próximos cinco años. Un giro a la derecha podría significar que se muestre menos entusiasta con las políticas de cambio climático y las reformas necesarias para la ampliación de la UE, pero más entusiasta con las medidas para limitar la inmigración.
ÚLTIMAS ENCUESTAS
Según una proyección realizada el domingo por la encuestadora Europe Elects, el PPE podría ganar cinco escaños con respecto al último Parlamento, para obtener un total de 183. El grupo socialdemocrata S&D, en el que se encuentra el partido del canciller alemán Olaf Scholz, perdería cuatro escaños y obtendría 136.
Los Verdes europeos, que se enfrentan a la reacción de los hogares, los agricultores y la industria ante las costosas políticas de la UE para limitar las emisiones de CO2, se perfilan como uno de los grandes perdedores, ya que el sondeo del domingo les otorga solo 56 diputados, lo que supone una pérdida de 16.
Las previsiones para el grupo liberal Renew Europe también son sombrías, dada la expectativa de que el partido de ultraderecha Agrupación Nacional de Marine Le Pen derrote al del centro Renacimiento del presidente francés Emmanuel Macron en Francia.
El sondeo del domingo situaba las pérdidas del grupo liberal en 13 escaños, pronosticando que acabará con 89.
Por el contrario, la encuesta dice que el grupo conservador-nacionalista ECR probablemente obtendrá cinco diputados más para un total de 73 y el grupo de extrema derecha ID podría obtener ocho escaños más para un total de 67.
Más diputados podrían unirse a los grupos de derecha y extrema derecha de entre el grupo de no afiliados, que serían 79, según el sondeo.
En un colegio electoral del norte de París, la estudiante Elisa Dubois, de 18 años, se mostró preocupada por el auge de la extrema derecha en toda Europa.
"Si crecen también en Francia, pueden unirse y es bastante peligroso", dijo.
El Parlamento Europeo emitirá un sondeo a pie de urna en toda la UE hacia las 20.30 CET (18.30 GMT) y, a continuación, un primer resultado provisional después de las 23.00 CET, cuando se hayan emitido los votos definitivos, en Italia.
GIRO A LA DERECHA
Las previsibles pérdidas de liberales y verdes proeuropeos reducirán la mayoría del centro-derecha y el centro-izquierda y complicarán los esfuerzos por impulsar nuevas leyes comunitarias o aumentar la integración europea.
Muchos votantes se han visto afectados por el coste de la vida, les preocupa la emigración y el coste de la transición verde y están inquietos por las tensiones geopolíticas, incluida la guerra en Ucrania.
Los partidos duros y de extrema derecha se han aprovechado de ello y han ofrecido al electorado una alternativa.
"Quien crea que necesitamos un cambio de rumbo y que se pueden hacer las cosas mucho mejor en Bruselas tiene una única alternativa, que es Vox", dijo tras votar en Madrid Jorge Buxadé, el principal candidato del partido de ultraderecha español.
En Países Bajos, los sondeos a pie de urna mostraron el jueves que el partido antiinmigración del nacionalista Geert Wilders iba a ganar siete de los 29 escaños neerlandeses en la asamblea de la UE, de cero en 2019, tras su amplia victoria en las elecciones nacionales del año pasado.
Su Partido de la Libertad se quedará a solo uno de los escaños combinados de una alianza entre socialistas, demócratas y verdes.
En Bélgica, los votantes también eligen el domingo las cámaras federal y regionales, y se prevé que respalden al partido separatista flamenco de extrema derecha Vlaams Belang en cifras récord, aunque aún podría quedarse fuera del gobierno si otros partidos se ponen de acuerdo.
Es probable que el gobierno del primer ministro Alexander De Croo permanezca en funciones durante muchos meses hasta que se forme una nueva coalición multipartidista.
Con información de Reuters