(Corrige fecha en copete)
Cerrando la brecha de atención es el lema de la Semana de las Enfermedades No Transmisibles (ENT) que se inicia hoy y se extenderá hasta el 21 de septiembre, una iniciativa internacional cuyo objetivo es contribuir a la reducción del impacto global de estas afecciones responsables de 8 de cada 10 muertes en las Américas.
Organizada cada año desde 2018 antes de la Reunión de Alto Nivel de las Naciones Unidas sobre las ENT, el énfasis este año está puesto en que todas las personas tengan acceso a servicios de salud esenciales y asequibles, además de incentivar la disminución de la carga de estas enfermedades mediante acciones individuales y sanitarias en general, que promuevan la prevención de la salud a través del control de los factores de riesgo
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Las ENT causan la muerte de 5,5 millones de personas por año en todo el continente, muchas de las cuales podrían evitarse si se redujeran los factores de riesgo más comunes, como el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol, el sedentarismo y la alimentación poco saludable, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Estas afecciones suelen ser de carácter crónico y su aparición se debe a la conjunción de factores genéticos, ambientales, fisiológicos y de comportamiento o hábitos.
A nivel global, provocan cada año cerca de 41 millones de muertes, lo que equivale al 74% de los fallecimientos globales.
Entre las principales ENT, se encuentran las enfermedades cardiovasculares (como infarto agudo de miocardio y accidente cerebrovascular), el cáncer, las enfermedades respiratorias crónicas, la diabetes y los trastornos de salud mental.
Según la OPS, el género impacta en los niveles de exposición y vulnerabilidad a los factores de riesgo. Por ejemplo, las mujeres tienen mayor riesgo de desarrollar obesidad, lo que a su vez aumenta su posibilidad de desarrollar otras ENT, como diabetes1.
Asimismo, en América, la depresión se presenta dos veces más en las mujeres que en los varones y entre el 10 y 15% de las mujeres en países industrializados.
El abordaje de las ENT tiene múltiples aristas. Desde lo médico, podemos fomentar la concientización de las personas con campañas y acciones. Sin embargo, hay una brecha entre esto y que el paciente pueda concurrir formalmente a la consulta, por múltiples cuestiones: su situación laboral, socioeconómica, si tiene o no cobertura social, la cercanía con el centro de atención, la disponibilidad de turnos y de especialidades, sostuvo Nicolás Renna, presidente de la Sociedad Argentina de Hipertensión Arterial.
El especialista explicó que las enfermedades crónicas no transmisibles se ven influenciadas principalmente por patologías prevalentes tales como la hipertensión arterial que afecta entre el 35 y el 40% de la población, la obesidad que padece el 60 y la diabetes que ronda entre el 9 y el 12%.
Si bien las mujeres concurren más a los controles que los hombres, muchos de los síntomas vinculados a lo cardiovascular pueden pasar más desapercibidos en ellas o ser subestimados en comparación con los varones, dijo.
Por otro lado, durante mucho tiempo se ha extendido erróneamente que estas son enfermedades de un solo género, el masculino, y desde hace un tiempo, existen en el mundo campañas para concientizar cómo influye la enfermedad cardiovascular en la mujer, no sólo en la postmenopausia, sino también durante su edad fértil o en el embarazo, agregó.
Por su parte el presidente de la Asociación Argentina para el Estudio del Dolor (AAED) , Santiago Guaycochea, explicó que muchos de estos pacientes tienen diabetes, hipertensión o han sufrido un ACV con secuelas motoras, y pueden estar acompañadas de dolor, y la comorbilidad aumenta, por lo tanto, también la mortalidad, disminuyendo la calidad de vida.
En el caso de la diabetes, los pacientes con mal control glucémico, pueden presentar dolor neuropático, como por ejemplo la Neuropatía Diabética Periférica. La Fibromialgia es uno de los síndromes dolorosos más frecuentes, con mecanismo nociplástico, y tiene una prevalencia de cerca de un 4% de la población y puede acompañarse, con frecuencia, con depresión o ansiedad, que son ENT, concluyó.
Con información de Télam