La comunidad científica de Formosa, con diversos movimientos organizados y representantes del ámbito académico, manifestaron su preocupación por el impacto negativo que los recortes presupuestarios del Gobierno nacional, dirigido por Javier Milei, tienen en la ciencia y la tecnología en Argentina. Estos recortes ponen en peligro el desarrollo y la investigación, y afectan a Universidades públicas y otros organismos dedicados al avance científico en todo el país.
El término "cientificidio", acuñado por los especialistas, cobró relevancia para describir el desmantelamiento sistemático del sistema científico-tecnológico. José Carmelo Duarte, representante de Formosa en la Mesa Federal de Ciencia y Tecnología, explicó que el término refleja el deterioro estructural que está sufriendo el sistema de ciencia y tecnología en Argentina.
Un panorama sombrío
Según el referente, esta situación afecta tanto a las Universidades públicas como a las agencias de investigación que fueron parte de un proyecto de consenso, el cual tuvo su último gran logro en la sanción de la ley de financiamiento del sistema científico-tecnológico. En esa línea, advirtió que el desmantelamiento pasa por varias etapas: la sub-ejecución de partidas presupuestarias, el despido de trabajadores del sector, la venta de activos estratégicos y, finalmente, la desinversión en personal formado durante décadas.
Según señalo el formoseño, este proceso pone en riesgo la soberanía científica y tecnológica del país, lo que constituye un activo estratégico fundamental para cualquier nación. "Las Universidades públicas son esenciales para el sistema de investigación en Argentina, y hoy asistimos a su desguace", afirmó.
Las manifestaciones en defensa de la Universidad pública se enmarcaron en esta situación crítica, denunciando que las medidas del Gobierno son una expresión concreta del "cientificidio".
Universidades, un pilar en riesgo
El impacto de los recortes no solo afecta a las instituciones científicas, sino también a las Universidades, que históricamente fueron centros de formación de profesionales y de producción de conocimiento en todo el país. Duarte señaló que las Universidades desde Jujuy hasta Tierra del Fuego se desarrollaron avances científicos de relevancia internacional, que hoy se encuentran en peligro.
El rol de la Mesa Federal, según Duarte, es visibilizar la importancia de la ciencia y tecnología en Argentina, en especial en un contexto donde los recortes debilitan la capacidad de generar conocimiento y soluciones aplicadas a los problemas reales del país. "No hay ciencia y tecnología sin planificación y sin apoyo a un proyecto nacional que priorice el bienestar del pueblo argentino", subrayó. La comunidad científica y académica continuará su lucha en defensa de un sistema público de investigación que, según sostienen, es clave para el desarrollo y la soberanía nacional.