Desde el Laboratorio de Especialidades Médicas de Formosa (Laformed) señalaron que continúan avanzando en infraestructura, producción, investigación y desarrollo tecnológico ante la alerta por la situación del dengue, por lo que están fortaleciendo la producción de larvicidas y repelentes para mosquitos.
En dialogo con el portal Agenfor, Florencia Barcalá, directora técnica de la planta de sólidos, semisólidos y magistrales, puso en relieve que todos los productos del laboratorio se distribuyen de forma gratuita en toda la provincia. “Ello a partir de la decisión del gobernador Gildo Insfrán, y mediante el Ministerio de Economía, Hacienda y Finanzas, podemos seguir avanzando en infraestructura”, subrayó.
"Hace poco se inauguró la planta domisanitario dedicada a la fabricación de larvicidas e insecticidas, y especialmente, en este momento, haciendo hincapié en los repelentes”, agregó el ingeniero industrial Edgar Gutiérrez.
Esto se debe a que tanto el larvicida como el repelente son productos esenciales contra el mosquito vector aedes aegypti, por lo que “en la planta domisanitario se elaboran larvicidas e insecticidas, mientras que en la parte de especialidades medicinales, repelentes, pastas dentales y productos parenterales”.
En este sentido, el larvicida biológico es utilizado para eliminar las larvas del mosquito vector, por ejemplo, en un tanque de agua de 30 litros se debe colocar entre 30 a 40 gotas. La ventaja que tiene este producto es que “no es tóxico”, por lo que está preparado para ser utilizado en los domicilios y “en todos aquellos recipientes que contenga agua que no se puedan eliminar”.
Por su parte, el repelente “actúa como una barrera transparente al contener una sustancia que ataca al mosquito". Es tanto para niños como adultos y tiene una duración de cinco horas.
Bajo esta línea, añadió que también se está investigando “para elaborar repelentes en base a otras sustancias", por lo que destacó "la investigación, producción y desarrollo tecnológico que tiene Laformed para así seguir avanzando”.
Sobre los productos parenterales que son destinados al Hospital de la Madre y el Niño y el Hospital Central, explicó que “la alimentación parenteral es básicamente para los niños que nacieron antes de la semana 37, en consecuencia, con su aplicación, la criatura tiene los nutrientes básicos que necesita”.
Por último, señaló que “hay muchas personas que prestan colaboración en materia de capacitaciones, como la parte organizativa, es así que con dos universidades se viene trabajando; una de Chaco, que es la Universidad Nacional del Chaco Austral (UNCAus), y la otra, la Universidad Tecnológica Nacional (UTN)”.