Decenas de refugiados que llegaron a Australia en barco hace una década y que esperaban reasentarse en Estados Unidos se han visto afectados por la congelación de los programas de refugiados por parte de la administración Trump, según ha informado un responsable australiano a Reuters.
Australia está "esperando más asesoramiento" del Gobierno de Estados Unidos sobre el funcionamiento en curso de su programa de refugiados, suspendido por una orden ejecutiva firmada por el presidente Donald Trump el 20 de enero, dijo un portavoz de Asuntos Internos.
"Menos de 30 individuos transitorios continúan buscando el reasentamiento en Estados Unidos a través del acuerdo de reasentamiento de Estados Unidos: los casos se encuentran en varias etapas del proceso", dijo.
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Australia no permite que los solicitantes de asilo que llegan en barco se establezcan en el país. Hace una década, Canberra introdujo una estricta política de tramitación en el extranjero, en virtud de la cual los solicitantes llegados en barco eran trasladados a campamentos en Nauru y Papúa Nueva Guinea (PNG), naciones insulares del Pacífico, para evaluar sus solicitudes de asilo.
En virtud de un acuerdo alcanzado en 2016 con el Gobierno de Obama, Estados Unidos aceptó reasentar hasta 1.250 refugiados procedentes de los centros de tramitación en el extranjero de Papúa Nueva Guinea y Nauru.
En su primera presidencia, Trump se quejó del acuerdo, pero lo aceptó.
El Ministerio del Interior dijo en agosto que 1106 refugiados habían podido reasentarse en Estados Unidos en virtud del acuerdo, aunque muchos se encontraban también en "diversas fases de las actividades previas a la salida".
El Gobierno de centro-izquierda del primer ministro Anthony Albanese ha intensificado sus esfuerzos para demostrar que está disuadiendo la llegada de embarcaciones, mientras que las elecciones nacionales están previstas para mayo.
El ministro del Interior, Tony Burke, viajará a Nauru el jueves y dijo en un comunicado que visitará el centro de procesamiento regional.
Australia sigue enviando a Nauru un pequeño número de solicitantes de asilo que llegan en barco cada mes, aunque el centro de Papúa Nueva Guinea cerró después de que un tribunal dictaminara que era ilegal.
Con información de Reuters
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