Las fuerzas israelíes llevaron a cabo nuevas incursiones en la Franja de Gaza el miércoles, horas antes de que el primer ministro Benjamin Netanyahu se dirigiera al Congreso de Estados Unidos.
Los últimos ataques israelíes destruyeron viviendas en localidades situadas al este de Jan Yunis, en el sur de Gaza, y miles de personas se vieron obligadas a dirigirse hacia el oeste en busca de refugio, según manifestaron los residentes.
El Servicio Civil de Emergencias palestino dijo que había recibido llamadas de socorro de residentes atrapados en sus casas en Bani Suhaila, al este de Jan Yunis, pero que no habían podido llegar a la ciudad.
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El ejército israelí, que trata de erradicar al grupo miliciano islamista Hamás tras el ataque del 7 de octubre contra Israel, dijo que había estado operando en zonas desde las que los combatientes habían podido disparar cohetes contra Israel y atacar a las tropas israelíes.
Las autoridades sanitarias de Gaza afirmaron que los ataques militares israelíes de las últimas 24 horas habían causado la muerte de al menos 55 personas, las últimas víctimas de una guerra que, según las autoridades sanitarias del enclave, ha matado a más de 39.000 palestinos.
"¿Adónde debemos ir? ¿Cruzamos al mar?", dijo Ghada, que se ha desplazado con su familia seis veces durante la guerra, desde la ciudad de Hamás, en el noroeste de Jan Yunis.
"Estamos agotados, hambrientos, y queremos que la guerra termine ya, ahora y no una hora más tarde. Cada día que pasa, más familias son borradas del libro de registro", dijo a Reuters a través de una aplicación de chat.
Los residentes locales dijeron que se les había ordenado dirigirse hacia el oeste, hacia una zona humanitaria designada, pero que la zona era ahora insegura.
Las fuerzas israelíes también llevaron a cabo ataques aéreos en varias zonas del centro y el norte de la Franja de Gaza, matando e hiriendo a varios palestinos, según informaron fuentes sanitarias.
Residentes de Ráfah, cerca de la frontera con Egipto, dijeron que las fuerzas israelíes habían volado varias casas en el oeste de la ciudad.
LOS PALESTINOS CRITICAN A EEUU
Los combatientes de Hamás desencadenaron la guerra el 7 de octubre al irrumpir en el sur de Israel, matando a 1.200 personas y capturando a 250, según los recuentos israelíes. Unos 120 rehenes siguen retenidos, aunque Israel cree que uno de cada tres ha muerto.
Algunos palestinos que se congregaron en un hospital de Jan Yunis antes de los funerales criticaron a Estados Unidos, el aliado internacional más importante de Israel, por dar la bienvenida a Netanyahu.
El líder israelí tenía previsto dirigirse al Congreso a última hora del miércoles y reunirse con el presidente Joe Biden en la Casa Blanca el jueves. El candidato presidencial republicano Donald Trump dijo que se reuniría con Netanyahu en Florida el viernes.
"Estados Unidos es un socio principal en lo que está ocurriendo en Gaza. Nos están matando por culpa de Estados Unidos. Nos están masacrando aviones estadounidenses, barcos estadounidenses, tanques estadounidenses y tropas estadounidenses", dijo Kazem Abu Taha, un residente desplazado de Ráfah.
Un alto cargo de Hamás, Sami Abu Zuhri, declaró a Reuters: "La invitación del Congreso a Netanyahu para pronunciar un discurso da legitimidad a los crímenes de la guerra de genocidio en Gaza. Recibir a un criminal de guerra es una vergüenza para todos los estadounidenses".
Israel ha rechazado las acusaciones presentadas por Sudáfrica ante el máximo tribunal de la ONU de que su operación militar en Gaza es una campaña de genocidio dirigida por el Estado contra los palestinos. Ha reaccionado airadamente a la decisión del fiscal de la Corte Penal Internacional de solicitar una orden de detención contra Netanyahu.
Netanyahu dijo esta semana que podría estar cerca un acuerdo para liberar a los israelíes cautivos en Gaza. Pero representantes de Hamás dijeron que Netanyahu estaba dando largas y que no habían visto ningún cambio en la postura israelí que permitiera llegar a un compromiso.
Hamás quiere un acuerdo de alto el fuego para poner fin a la guerra en Gaza. Netanyahu dice que la guerra no puede terminar antes de que Hamás sea erradicada.
Con información de Reuters