Durante cuatro días, el multimillonario Elon Musk recorrió Pensilvania poniendo su dinero y su fama al servicio del equipo de campaña del republicano Donald Trump para recuperar la Casa Blanca en noviembre.
Musk fue elogiado por los conservadores en sus mítines mientras respondía a preguntas sobre inteligencia artificial, regulación gubernamental, robots sensibles y vacunas.
También hizo una serie de afirmaciones falsas sobre fraude electoral, algunas de las cuales se hacían eco de las realizadas por Trump en los últimos cuatro años.
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Musk, consejero delegado de Tesla y SpaceX y propietario de la red social X, también entregó dos cheques de un millón de dólares a personas elegidas al azar que firmaron su petición de internet en apoyo de los derechos constitucionales estadounidenses a la libertad de expresión y a portar armas.
Musk, de 53 años, tiene más que un interés pasajero en el éxito de Trump. Si es reelegido, Trump promete nombrar a Musk jefe de una comisión de eficiencia gubernamental, un trabajo que Musk promete que ayudará a librar al país de regulaciones que él considera malas para la economía y disuasorias para los negocios.
DINERO EN EFECTIVO
El sábado, Musk sorprendió a una multitud de 1.500 personas en una iglesia no confesional de Harrisburg, la capital de Pensilvania, cuando anunció que iba a regalar un millón de dólares. El primer ganador fue John Dreher, que se apresuró a subir al escenario con una característica gorra roja de MAGA, bombeando los brazos en el aire.
"Te sigo desde hace 10 años, conseguí tu biografía hace 10 años y te he estado observando desde entonces", dijo Dreher a Musk.
El domingo, Musk entregó otro cheque de un millón de dólares a Kristine Fishell, que parecía atónita cuando se pronunció su nombre y subió al escenario con una camiseta roja de Trump.
"Muchas gracias por... Quiero decir que realmente creo todo lo que estás haciendo, de verdad. No necesitas estar haciéndolo, sé que muchos de nosotros sentimos lo mismo", dijo Fishell.
Musk explicó que los ganadores se eligen al azar, pero deben haber firmado su petición y estar registrados como votantes en los estados más disputados que decidirán las elecciones de noviembre, como Pensilvania, Georgia y Arizona.
Sus folletos han suscitado dudas legales.
CONSPIRACIONES
Musk también ha hecho suyas las teorías conspirativas impulsadas por Trump, y está creando algunas propias.
Revivió teorías falsas que afirman que las máquinas de votación amañan las elecciones, una afirmación que ha sido desmentida en repetidas ocasiones desde que fue impulsada por aquellos que buscan anular la derrota de Trump en 2020.
Mencionó a Dominion Voting Systems, que el año pasado demandó a Fox News por difamación sobre falsas afirmaciones de que la empresa participó en una conspiración de manipulación de votos. Dominion llegó a un acuerdo histórico de 787 millones de dólares con la cadena.
"Siempre se plantea la cuestión de las máquinas de votación de Dominion. Es extraño que, ya sabes, creo que se utilicen en Filadelfia y en el condado de Maricopa (Arizona), pero no en muchos otros lugares".
En un comunicado, Dominion señaló inexactitudes en los comentarios de Musk, incluido el hecho de que no operan en Filadelfia.
Musk también acusó a los demócratas de canalizar un gran número de personas migrantes que entran de manera irregular en Estados Unidos hacia los estados más disputados.
Sin presentar pruebas, alegó que Harris legalizaría a las personas migrantes después de las elecciones si gana, lo que daría a los demócratas claras mayorías en esos estados.
El equipo de campaña de Harris no respondió inmediatamente a las peticiones de comentarios. En el pasado se han desmentido afirmaciones similares.
"PUBLICAR LAS PRUEBAS"
Para muchos de los asistentes a los eventos, la idea de que las elecciones de 2020 fueron robadas a Trump fue tomada como un hecho a pesar de la falta de pruebas.
Un asistente en Harrisburg preguntó a Musk qué estaba haciendo para evitar que se repitiera. Musk respondió inclinándose por las acusaciones infundadas.
"Quiero decir que si el margen de victoria es lo suficientemente alto, entonces creo que puede superar cualquier tipo de trampa que pueda tener lugar. Así que vamos a apuntar a un margen masivo", dijo Musk.
Musk animó a la gente a utilizar su plataforma X, antes conocida como Twitter, para llamar la atención sobre posibles trampas en las elecciones.
"Si la gente cree que hay fraude, que publique las imágenes, los vídeos y las pruebas", dijo.
TIBURONES Y BALLENAS
Musk tiene millones de dólares en contratos con el Gobierno y sus empresas se enfrentan a importantes y a veces costosas regulaciones gubernamentales que normalmente están diseñadas para proteger cosas como los consumidores, el agua potable y la vida silvestre.
Se le preguntó a Musk si en un trabajo así llevaría un lanzallamas a las pilas de normativas y publicaría un vídeo de ello. "Creo que una hoguera de normativas sin sentido sería épica", dijo Musk.
Musk relató cómo SpaceX se vio obligada a realizar un estudio para determinar si sus cohetes dañarían a los tiburones al aterrizar en el agua.
"Es un océano grande, ya sabes, hay muchos tiburones. No es imposible, pero es muy improbable", dijo Musk.
A regañadientes, realizaron el estudio solo para que les dijeran de hacer una revisión similar sobre las amenazas potenciales para las ballenas, dijo Musk.
Con información de Reuters
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