Durante la última semana, la Cámara Argentina de Supermercados (CAS) y la Federación Argentina de Supermercados y Autoservicios (FASA), minifestaron una preocupación generalizada por el desplome de las ventas en todo el país, debido a la creciente inflación en los preicios. En función a ello, el presidente de la Cámara de Pequeñas y Medianas Empresas de Formosa (CAPyMEF), Carlos Werlen, detalló: “Los aumentos siguen golpeando los bolsillos de los consumidores. Entonces, lógicamente, se está agravando día a día este tema”.
En ese sentido,Werlen se refirió al cierre de un supermercado en la provincia de La Rioja y aseguró: “Alarmó a todos, pero el problema también surge en Rosario, Salta y en todo el país por la situación de la baja de las ventas”. En el caso de los supermercados y autoservicios de Formosa, Werlen aseguró que acompañan la media del país, pero que no pueden estar ajenos al problema.
El presidente de CAPyMEF también mencionó que la decisión del presidente Javier Milei de neutralizar la obra pública repercute gravemente en la provincia: “Por decisión del gobierno nacional, está totalmente paralizada y muchos trabajadores hoy están sin trabajo. Eso golpea a los comercios de proximidad”.
También señaló que los mayoristas están teniendo una baja de ventas a nivel nacional, al igual que los supermercados. Esta situación fue notoria en el mes de diciembre, y luego se acentuó en enero y en febrero. “Veremos cómo va a venir marzo, más con el tema de Semana Santa, donde va a haber un movimiento importante”, planteó Werlen.
Por último, el presidente de CAPyMEF destacó que los nocivos efectos de las medidas macroeconómicas adoptadas por el Ejecutivo repercuten en la economía doméstica: “El rubro lácteo es uno de los más golpeados por la baja que hay en la cuenca lechera, de un 30% menos de producción. Eso pega directamente en precios y en faltantes de mercadería".
El tarifazo: otro factor que preocupa
El gobierno nacional anunció que dejará de subsidiar las tarifas de energía eléctrica de comercios y pymes, lo cual es un duro golpe para el sector. En el caso de los comercios pequeños con una potencia de 10 KW y un consumo de 1.200 kwh/mes, tuvieron un incremento del 276% en el precio mayorista de la energía. Hasta enero, estos usuarios pagaban el 18% del costo. En el AMBA, pasaron de abonar una factura de $64.775 a $266.213 en febrero, con impuestos.
En el caso de los pequeños usuarios industriales, con una potencia contratada de 35 KW y un consumo mensual de 6.500 Kwh/mes, tuvieron un incremento en el precio de la energía del 178%. Hasta enero, estos usuarios pagaban el 31% del costo de la energía: pasaron de abonar una factura de $274.875 a $1.060.187 en febrero.
Pese a este ajuste que propone el gobierno Nacional, el subsecretario de Desarrollo Económico de la provincia de Formosa, Horacio Cosenza, informó la semana pasada que el apoyo a las pymes va a continuar en la provincia, tal como lo manifestó el gobernador Gildo Insfrán en el discurso con el que abrió las sesiones ordinarias en la Legislatura. “Se va a seguir apuntalando tanto al sector pyme, como al industrial y el comercial de la provincia”, afirmó el subsecretario.
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