Este jueves, el INDEC dio a conocer el Índice de Precios al Consumidor (IPC) correspondiente a mayo 2024. La región del Noreste argentino (compuesta por Formosa, Corrientes, Misiones y Chaco) registró 3,7 puntos de inflación, colocándose por debajo del nivel nacional, que acumuló 4,2 puntos. El rubro de mayor aumento en el NEA fue el de Educación (9,9%), debido a los ajustes por parte del Gobierno nacional en el área, seguido por el de Comunicación (7,8%), producto de los aumentos nacionales en servicios de telefonía e internet.
En lo que respecta al rubro de Alimentos y bebidas no alcohólicas, fundamental para la subsistencia diaria, el documento que publicó el INDEC demuestra que el rubro se mantiene en un aumento sostenido en la región del NEA: en mayo, tuvo una variación del 3,4% en relación al mes anterior. A su vez, cuando se analiza qué alimentos sufrieron el mayor impacto, los cuadros publicados revelan que las Verduras, tubérculos y legumbres alcanzaron un aumento del 13,4%; seguido, bastante más atrás, por la categoría de Leche, productos lácteos y huevos, que llegaron al 4,6%.
Con respecto al acumulado en la región desde diciembre de 2023, es decir, desde la asunción de Javier Milei como presidente de la Nación, el informe indica que la inflación en el rubro de Alimentos y bebidas no alcohólicas trepó al 51%. Durante este periodo de seis meses, puede observarse que el mayor aumento lo tuvo la categoría de Leche, productos lácteos y huevos, que alcanzó un pico del 90,6%; seguido por las Verduras, tubérculos y legumbres, que aumentaron un 76,4%; y las Aguas minerales, bebidas gaseosas y jugos, que treparon a un 72,4%.
Por otro lado, si se compara la inflación de mayo 2024 con respecto al mismo mes del año anterior, el rubro de Alimentos y bebidas no alcohólicas en el NEA se destaca por acumular un 262,2% de variación. En el transcurso de un año, según los datos publicados por el INDEC, la categoría que mayores aumentos acumuló es el de Aguas minerales, bebidas gaseosas y jugos, con un 326,5%; seguido de cerca por la categoría de Pan y cereales, que alcanzó un 285%; y por la de las Verduras, tubérculos y legumbres, que sumaron un aumento del 280,8%. Estos abrumadores porcentajes, en consumos alimenticios clave para llevar adelante una dieta equilibrada, son un claro ejemplo de por qué los sueldos pierden cada vez mayor poder adquisitivo.