En los últimos días, la consultora Politiké dio a conocer un análisis que coloca a Formosa como una de las cinco provincias más perjudicadas por la caída en las transferencias no automáticas, decidida por el gobierno nacional. Junto a Chaco, ambas provincias figuran encabezando el ranking de las provincias que registraron mayores bajas en las transferencias, desde febrero del 2023 hasta el mes pasado. Las acompañan Entre Ríos, La Pampa y La Rioja.
A pesar de que el presidente Javier Milei hizo un llamado a los gobernadores para acordar un supuesto alivio fiscal, con vistas a la eventual firma del Pacto de Mayo en Córdoba, el Ejecutivo dejó de pagar transferencias no automáticas a las provincias. Según los datos difundidos por la consultora, las 24 jurisdicciones tuvieron caídas reales en la distribución de las transferencias discrecionales efectuadas por la Nación, acumuladas al mes de febrero 2024 con respecto al mismo periodo del año anterior, siendo las más afectadas Formosa (-88,4%), Chaco (-88,9%), Entre Ríos (-85,3%), La Pampa (-85,6%) y La Rioja (-92,5%).
Al mismo tiempo, Politiké señaló que, si se observan las transferencias totales durante el mes de febrero, de la Nación a las provincias (contando incluso la coparticipación), la comparación interanual arroja que el total de las jurisdicciones del país sufrieron caídas en términos reales. En lo que respecta a la provincia de Formosa en particular, la reducción de los recursos fue del 20,20%. En cuanto al resto del NEA, la caída en recursos totales fue la siguiente: Misiones (una baja del 21%), Corrientes (20,8% menos) y Chaco (bajó 20,4%).
¿Qué son las transferencias no automáticas?
Es importante destacar que existen dos vías para la transferencia de recursos de la Nación a las provincias. La principal de ellas es la coparticipación federal, un sistema mediante el cual el gobierno central distribuye entre las provincias parte de la recaudación de algunos impuestos nacionales, de forma automática y con frecuencia diaria. Tanto los impuestos que se coparticipan como el porcentaje que le corresponde a cada provincia, están regidos por la Ley de Coparticipación Federal que se aprobó en 1988.
Por otro lado, una segunda forma de reparto es a través de lo que se denominan transferencias no automáticas, dado que pueden ser repartidas según la voluntad del Ejecutivo nacional. El subsecretario de Hacienda y Finanzas de Formosa, Miguel Antinori, aclaró al respecto: “Ese paquete (de transferencias de recursos), si bien algunas eran tipificadas como discrecionales, tenían un carácter regular, como los salarios docentes”.
Además, Antinori informó que los compromisos de Nación abarcaban el Fondo de Incentivo Docente, Conectividad y el Programa de Extensión Horaria, que apuntaba a mejorar la calidad educativa. A ello se sumaban otras políticas, como la asistencia alimentaria en comedores escolares, el programa de módulos alimentarios modalidad aborigen, el Plan Nacer y el Remediar Salud, entre otros. Además, en las transferencias se incluían gastos como la construcción de viviendas, rubros transferidos al Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA) para la construcción de plantas de agua potable, y construcción de infraestructura vial por convenio con Vialidad Nacional.
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