A raíz de la suba en casos de dengue, desde el Gobierno de Formosa continúan con el trabajo preventivo en la lucha contra el mosquito para erradicar todo tipo de elemento que pueda contener agua y evitar así las larvas del Aedes Aegypti, transmisor de la enfermedad. Este martes la acción preventiva se focalizó en el barrio San Francisco con el rastrillaje casa por casa, y en dos sectores más de la ciudad, con la tarea de bloqueo de viviendas con personas enfermas de dengue.
En comunicación con el portal Agenfor, el subsecretario de Medicina Sanitaria, Manuel Cáceres, afirmó que las brigadas sanitarias continúan con su trabajo de visitar cada casa, para descacharrizar y fumigar distintos puntos del domicilio, así como también asesorar a los vecinos sobre cómo deben limpiar su hogar para evitar que las larvas tengan un lugar propicio.
“Tenemos 30 grupos trabajando en el barrio, en simultáneo en otros dos lugares de la ciudad haciendo bloqueos, otra modalidad de trabajo que consiste en visitar los domicilios donde se denunció la existencia de dengue, para bloquear ese sector y toda la manzana alrededor”, explicó el funcionario provincial.
El lunes las brigadas visitaron 1040 viviendas, de las cuales 148 tenían reservorios con mosquitos. “Es decir larvas de mosquitos en el fondo de esa vivienda. Esa larva está generando entre mil a dos mil moquitos por cada vivienda, es el que da el pool de mosquitos que comenzarán a volar y en caso de que piquen a un paciente con dengue, se contagia y al picar, comienza a transmitir la enfermedad”, alertó Cáceres.
La situación sanitaria en la provincia
Frente a la gran suba de casos de dengue en la provincia, que llegó a 912 durante la última semana, la diputada macrista Gabriela Neme propuso como posible solución la fumigación aérea sobre toda la provincia. A través de sus redes sociales, la diputada aprovechó para atacar al gobernador Gildo Insfrán al decir que "tiene una oportunidad de hacer algo por la población para evitar que se sigan muriendo". Sin embargo, la diputada no tuvo en cuenta que este método implicaría perjudicar la salud de la población formoseña.
Según explicó el médico infectólogo Julián Bibolini, Argentina no cuenta actualmente con aviones pulverizadores ni pilotos certificados para salud pública con los requerimientos técnicos exigidos por Organización Mundial de la Salud (OMS) para garantizar la efectividad de los rociados en el control de mosquitos.
“Las aplicaciones realizadas sin los procedimientos técnicos exigidos ponen en mayor riesgo la salud pública y el ambiente, ya que pueden causar un impacto negativo en la biodiversidad y en particular un efecto perjudicial en polinizadores y otras especies de insectos benéficos”, detalló.
En comunicación con El Destape, el presidente del laboratorio Laformed, Rodrigo Gómez, explicó que mantienen una fuerte campaña para combatir los casos de dengue en la provincia, en colaboración con el Gobierno provincial: "Proveemos al Estado provincial, más que nada en hospitales, nuestros productos para que estén al alcance de todos los vecinos de forma gratuita".
Entre los productos de los que se encarga el laboratorio para proveer al Gobierno provincial, se destacan el insecticida ambiental que se usa para las fumigaciones; el larvicida biológico para combatir las larvas de los mosquitos; alcohol en gel; y betametasona, una crema que se usa para tratar la picazón y enrojecimiento de la piel.