Debido al marcado ajuste del presidente Javier Milei sobre la economía, desde los comedores comunitarios de Formosa advierten que creció la asistencia de familias y con los aumentos “cada vez cuesta más conseguir la mercadería” para sustentar el servicio.
Una de las referentes de los comedores en Formosa es Fernanda Mógica, que desde el año 2000 lleva adelante un comedor y merendero comunitario del barrio San Miguel. En él asisten 25 familias que representan a un total de 114 beneficiarios teniendo en cuenta los integrantes de cada familia.
En ese sentido, la referente sostuvo que “la demanda aumentó a nivel general, porque cada responsable de los comedores nos manifiestan que necesitan ampliar el cupo porque cada vez hay más familias demandando ese acompañamiento, la crisis se hace sentir, el aumento de los precios”.
Por otra parte, señaló que el Gobierno nacional lleva adelante un plan de ajuste en el que recortó partidas presupuestarias para la asistencia alimentaria, cerró organismos públicos nacionales, despidió a miles de familias bajo el argumento de eliminar a los intermediarios entre el Estado y la sociedad. Sin embargo, en lugar de acortar las brechas solo generó mayor desigualdad.
Desde el año 2012, la Asociación trabaja en conjunto con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) que administra otros 10 comedores, que son financiados por el Banco Mundial a través del Banco de la Nación de la República Argentina.
Los comedores comunitarios representan una ayuda para las familias de las distintas jurisdicciones, algunos funcionan con financiamiento local y otros dependen de Nación. Estos últimos se vieron afectados por el recorte de fondos nacionales, los aumentos de precios de los alimentos y servicios y a su vez hizo que aumentara la cantidad de familias que asisten a comedores y merenderos de la provincia.
La Asociación Unidad de Coordinación para la Defensa del Vecino funciona en Formosa desde el año 2000, actualmente cuentan con 22 comedores y 20 merenderos distribuidos en los distintos barrios, los cuales reciben la ayuda del Gobierno provincial, pero la situación de dichos lugares y las familias que asisten se complica ante el ajuste nacional que plantea tarifazos de luz y aumento en todo tipo de servicios.
Bajo esta línea, Fernanda contó que “el comedor está más destinado a los niños y a los adultos mayores porque es una ayuda que tratamos de darles, acompañarlos sobre todo ahora más en esta crisis”. “En estos tiempos, que tenemos este Gobierno nacional volvió a recrudecer el tema de la gente en lista de espera, nosotros tenemos un cupo pero en todos nuestros comedores tenemos listas de espera, gente que realmente necesita que se las acompañe”, concluyó.