Los colonos israelíes están siguiendo de cerca las elecciones estadounidenses, dijo un dirigente de la comunidad, que expresó su confianza en que si gana Donald Trump levantará lo que consideran sanciones ilegítimas impuestas a algunos de ellos por ataques a palestinos.
Mientras gran parte de la atención mundial se ha centrado en la guerra de Gaza, la creciente violencia de los colonos israelíes contra los palestinos en Cisjordania y las apropiaciones de tierras en el territorio ocupado han suscitado preocupación entre algunos de los aliados occidentales de Israel.
Washington y otros países han impuesto congelaciones de activos y restricciones bancarias a colonos, puestos avanzados y grupos violentos, y han instado a Israel a hacer más para detener los ataques que, según ellos, socavan los esfuerzos por poner fin al conflicto.
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Israel Ganz, presidente del principal consejo de colonos de Yesha y que mantiene estrechos vínculos con el primer ministro Benjamin Netanyahu, describió las sanciones como una interferencia en el sistema legal de Israel que, en última instancia, causaría problemas al Gobierno.
"Si Trump gana las elecciones, no habrá sanciones", dijo a Reuters en una entrevista. "Si Trump pierde las elecciones, en el estado de Israel (...) tendremos un problema con las sanciones con el que el Gobierno de aquí tiene que lidiar".
A la pregunta por las sanciones, un portavoz de la oficina de Netanyahu no quiso hacer comentarios, mientras que el asesor principal de la campaña de Trump, Brian Hughes, dijo que "solo el presidente Trump restaurará la paz y la estabilidad en Oriente Medio para todos los pueblos".
La mayoría de los países consideran que los asentamientos judíos construidos en tierras que Israel capturó en la guerra de Oriente Medio de 1967 son ilegales según el derecho internacional y dicen que su expansión bloquea el único camino hacia una paz duradera: un Estado palestino viable junto a un Israel seguro.
En 2019, el entonces gobierno de Trump abandonó la posición estadounidense de larga data de que los asentamientos son ilegales antes de que fuera restaurada por el presidente Joe Biden.
Ganz dijo que las sanciones a los colonos son injustas, porque no se equiparan con las impuestas a los palestinos violentos, aunque Washington ha endurecido las sanciones a los grupos militantes palestinos desde el ataque dirigido por Hamás contra Israel el 7 de octubre.
"Las sanciones perjudican a familias y granjas", dijo Ganz, refiriéndose a las comunidades de asentamientos agrícolas en Cisjordania. Los palestinos afirman que estas comunidades ya les han arrebatado las mejores tierras y están dispuestas a quedarse con más.
Veinte palestinos han muerto este año por los ataques de colonos, según una organización afiliada a la Autoridad Palestina, además cientos de palestinos y docenas de israelíes que, según informes, han muerto en Cisjordania por cada bando mientras Israel lleva a cabo redadas contra militantes.
Ambas cifras incluyen civiles y combatientes.
La vicepresidenta y candidata presidencial demócrata Kamala Harris ha afirmado que los colonos extremistas deben rendir cuentas por los actos violentos, al tiempo que ha subrayado que Israel tiene derecho a defenderse de los ataques. Su equipo de campaña no respondió a una solicitud de comentarios sobre los comentarios de Ganz.
Con información de Reuters
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