El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, mantuvo hoy una reunión con arquitectos, ingenieros y desarrolladores para avanzar en el proyecto de ley de revisión del Código Urbanístico, el cual es foco de críticas de distintos grupos vecinales que consideran que la normativa destruyó la identidad barrial.
Uno de los compromisos que asumimos en campaña fue revisar el Código Urbanístico, que además está previsto en la Ley, y en eso estamos trabajando, explicó Macri tras el encuentro con los profesionales que se desarrolló en el complejo El Tambito, ubicado en el parque Tres de Febrero de Palermo.
El alcalde porteño estuvo acompañado por los secretarios de Desarrollo Urbano, Álvaro García Resta, y de Asuntos Estratégicos, Guillermo Romero.
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Según detallaron fuentes porteñas, el proyecto en análisis para cambiar el actual Código, que será enviado a la Legislatura, contempla ejes estratégicos alcanzados en base a los diagnósticos y consensos surgidos del diálogo e intercambio de ideas que llevó adelante el Gobierno.
En ese sentido, los abordajes son más inversión para dar impulso al desarrollo de infraestructura y servicios en los barrios del sur; más suelo libre y espacios vacíos en las zonas de mayor densidad poblacional y un fuerte compromiso con el cuidado y la protección del patrimonio histórico.
Queremos una Ciudad que siga desarrollándose, pero que también cuide la identidad de cada barrio, expuso Macri al respecto.
Agregó que finalizaron las reuniones con vecinos muchos movilizados pidiendo una revisión del Código y esta reunión de hoy es parte de los encuentros con profesionales y con desarrolladores para tratar de trabajar un Código para una Ciudad que crezca y que se desarrolle, pero que también encuentre un equilibrio en el cuidado del perfil de cada barrio.
El Código Urbanístico fue sancionado por la Legislatura en 2018 y debe ser actualizado obligatoriamente cada cuatro años, según prescribe la Ley.
Actualmente están en marcha los encuentros técnicos para delinear los principales puntos de la reforma y realizar la validación técnica y social de las propuestas generadas.
La normativa del 2018, en tanto, provocó el rechazo de colectivos de vecinos de la Ciudad que iniciaron tiempo atrás una campaña para denunciar la destrucción de la identidad barrial como consecuencia de la proliferación de nuevas construcciones de altura en zonas de casas bajas, así como también la eliminación de los denominados pulmón de manzana.
Por ello, pidieron la derogación del Código y la suspensión de los permisos de nueva obra hasta tanto se apruebe en la Legislatura en nuevo reglamento urbanístico.
Villa Devoto espera por el cumplimiento de las promesas de campaña, señalaron desde el grupo barrial de la Comuna 11, mientras que desde la agrupación Amparo Ambiental Chacarita manifestaron que la Ciudad necesita urgente otro Código Urbanístico.
Por último, a través de un comunicado conjunto de asambleas barriales, afirmaron que la participación ciudadana es nula y no sabemos cuáles serán las revisiones propuestas.
Con información de Télam