El presidente de China, Xi Jinping, felicitó el jueves por teléfono al presidente entrante del Consejo Europeo, António Costa, informaron los medios estatales chinos, pocas horas antes de que entren en vigor las restricciones de la Comisión Europea a los automóviles eléctricos chinos.
La Comisión va a confirmar aranceles provisionales de hasta el 37,6% a la importación de vehículos eléctricos fabricados en China, después de que el bloque acusara a la segunda economía mundial de conceder a sus empresas cuantiosas subvenciones estatales.
Xi afirmó que "concede gran importancia al desarrollo de las relaciones entre China y la UE", mientras Europa se prepara para las medidas de represalia de Pekín y la posible apertura de un nuevo frente en la guerra arancelaria de Occidente contra la economía de 18,6 billones de dólares.
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La política comercial de la UE se ha vuelto cada vez más proteccionista ante la preocupación de que el modelo de desarrollo de China, centrado en la producción, pueda inundarla de productos baratos, ya que las empresas chinas buscan aumentar sus exportaciones en un contexto de una débil demanda interna.
China y la Comisión Europea llevan negociando desde la semana pasada las restricciones que Pekín y algunos fabricantes de automóviles europeos quieren eliminar. Pekín rechaza las acusaciones de que los vehículos eléctricos chinos están injustamente subvencionados.
Xi afirmó que China "está comprometida con el desarrollo de la asociación estratégica integral China-UE", según los medios estatales. "China siempre ha considerado a Europa como un polo importante en el orden multipolar", añadió.
Corresponderá a Costa, ex primer ministro portugués, encontrar una causa común entre los 27 Estados miembros del Consejo, que vacilan sobre si respaldar a la Comisión sobre los aranceles a los vehículos eléctricos en una votación consultiva en las próximas semanas.
Alemania, cuyos fabricantes de automóviles realizaron un tercio de sus ventas el año pasado en China, quiere detener los aranceles, mientras que Francia ha sido uno de los más firmes defensores.
China está llevando a cabo una investigación "antidumping" sobre las importaciones europeas de brandy. Casi todas las exportaciones de brandy de la UE a China procedían de Francia el año pasado, según datos de las aduanas chinas.
Pekín también ha abierto una investigación "antidumping" sobre las importaciones de carne de cerdo europea y sus subproductos, que según los analistas pretende presionar a España, Países Bajos y Dinamarca para que rompan con la Comisión en relación con los recortes.
El "dumping" es una práctica comercial consistente en vender un producto por debajo de su precio normal o incluso por debajo de su coste de producción para obtener ventajas competitivas.
Con información de Reuters