El modelo del sarcófago de Eva Perón y la máscara de su rostro tamaño natural son algunos de los elementos que el orfebre Juan Carlos Pallarols conserva en su casa de la obra que se había iniciado en 1952 como parte del "Monumento al descamisado", en homenaje al trabajador.
Pallarols dedicó una sección de su casa-taller, ubicada en el barrio porteño de San Telmo, para preservar la obra que se había iniciado para el mausoleo de Eva Perón, interrumpida en 1955 por la autodenominada Revolución Libertadora.
En un entrepiso, el orfebre conserva una maqueta a escala reducida de la obra completa hecha por su padre del sarcófago de plata que iba a ser incorporado a los pies de una gigantesca figura de un trabajador de 45 metros de alto.
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"Eva Perón había viajado a Europa y cuando conoció el monumento donde están los restos de Napoleón en 'Los Inválidos' pidió que en la Argentina se realice un monumento un poco más grande que ese, y que sea el monumento al trabajador", explicó a Télam el orfebre.
Sin embargo, el decreto 4.161 de 1956 ordenó destruir todo elemento relacionado con el peronismo, por lo que la obra que había iniciado su padre fue destruida.
"Mi papá hacía toda la parte de plata. Tenía una lámina forjada toda a mano para seguir exactamente lo mismo que se veía del cuerpo de Eva Perón, para realizarla en un mayor tamaño. Con la ley 4.161 lo obligaron a destruir todo", recordó.
Por su parte, su padre logró ocultar la maqueta a escala reducida de la obra completa en una quinta en Rafael Calzada, localidad del partido bonaerense de Almirante Brown.
"Estuvo bajo tierra durante 25 años. Con el regreso de la democracia la desenterré y volví a armarla", añadió.
Al lado de la maqueta, además, posee una máscara de tamaño natural cuyo molde fue tomado del rostro inerte de 'Evita', acompañada de una urna electoral de madera de los años 50, una simbología especial para la época en la que el voto femenino en Argentina fue promulgado.
Dentro de su colección también posee un broche del escudo del Partido Justicialista, perteneciente a la reconocida dirigente argentina, que originalmente compró en Madrid, España, al que le hizo una copia para "prestarlo para producciones fotográficas o de video".
Asimismo, el orfebre posee una réplica de una gargantilla de oro, diamantes y rubíes realizada según un boceto de la joyería Van Cleef de París, Francia.
"El collar se lo había regalado alguien muy importante de la época. Lo que hice fue copiarla, pero en plata. Después lo doré y le puse piedras que son falsas", indicó.
Entre sus objetos de colección también se encuentra uno de los bastones presidenciales originales del tres veces presidente Juan Domingo Perón.
El orfebre señaló que pronto espera poder cerrar el ambiente dedicado a preservar la memoria de la dirigente conocida entonces como la "Jefa Espiritual de la Nación" y del trabajo de su padre, al que describió como "la obra de su vida".
Con información de Télam