El Gobierno de Formosa, encabezado por el gobernador Gildo Insfrán, completó este jueves el pago del suplemento especial no remunerativo de $200,000 a empleados públicos, tanto activos como pasivos, simultáneamente con el pago del Sueldo Anual Complementario (SAC) del primer semestre. El ministro de Economía, Hacienda y Finanzas de la provincia, Jorge Ibáñez, destacó la importancia de este logro financiero, atribuyéndolo a una gestión económica sin déficit y a la estricta disciplina fiscal de la administración provincial.
Ibáñez subrayó que este logro es "indudablemente fruto de un manejo sin déficit, de mucho tiempo, y de no gastar más de lo que la provincia tiene, es decir, de contar con las cuentas ordenadas". Según el ministro, la disciplina fiscal impuesta por el gobernador Insfrán fue crucial para mantener las finanzas provinciales en buen estado.
El pago del bono y del SAC no solo representa un alivio financiero para los empleados públicos, sino que también beneficia al comercio local. Ibáñez señaló que estos pagos "van directo al consumo y hasta a veces a la farmacia, porque lamentablemente los precios de los medicamentos han pegado un salto monstruoso". Esto implica un estímulo significativo para la economía local en un momento de dificultades económicas a nivel nacional.
El ministro reconoció que la provincia enfrenta "momentos difíciles debido a las medidas que se vienen tomando a nivel nacional", lo que incrementó las necesidades por satisfacer. A pesar de ello, destacó que Formosa cumplió con sus obligaciones principales, incluyendo el pago de salarios a los empleados públicos, el mantenimiento de los sistemas de educación, salud y seguridad, así como la obra pública provincial.
En relación a la obra pública, Ibáñez mencionó que existen problemas con las obras financiadas por el Gobierno nacional, muchas de las cuales están paralizadas. Informó que se están llevando a cabo gestiones y diálogos con la Nación para resolver estos problemas.
Sobre la propuesta del Estado nacional de transferir obras que no continuarán financiando, Ibáñez explicó que la provincia está analizando esta oferta, pero con la condición de que el Gobierno nacional se haga cargo de las deudas acumuladas con las empresas constructoras. "El problema actual que trae una obra paralizada desde diciembre de 2023 es que tienen deudas muy grandes con las empresas constructoras", indicó.
Entre las preocupaciones de la provincia, Ibáñez destacó las "obras grandes" como las plantas de agua potable y los acueductos. Un ejemplo específico es el acueducto del río Paraguay hasta Villafañe, que tiene 105 kilómetros de caños enterrados, pero aún faltan las obras complementarias. "Tenemos un montón de obras más que discutir y aclarar con Nación, porque queremos las obras, pero no las deudas", concluyó.
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