"¿Cuál es la alternativa? La alternativa es nada", afirmó la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, acerca del principio de acuerdo alcanzado con Argentina. En ese sentido, se refirió a las tensiones internas dentro del Gobierno y cómo afecta esa dinámica a la formalización del entendimiento final entre las partes.
"Nuestro equipo está muy enfocado en obtener lo mejor para el país, con el país", expresó Georgieva según consignó la agencia internacional Bloomberg. En ese sentido, sostuvo que el programa debe reconocer “los límites para hacer cambios en la Argentina en los próximos años, dada la oposición de la parte radical de izquierda de la coalición peronista gobernante del país”.
Al mismo tiempo, Georgieva remarcó la importancia de que el plan se base “en supuestos realistas” que no dependan de que se proyecte el mejor escenario. Y agregó: “Nuestro foco principal es sacar a la Argentina de este camino muy peligroso de la alta inflación”, dijo en una conferencia de prensa virtual.
Por otra parte, señaló que en la negociación existen “dos áreas de condicionalidad estructural” que vienen en el entendimiento alcanzado a nivel del staff técnico: los cambios en impuestos y en el gasto público. En un encuentro con los medios, Georgieva afirmó que el FMI está enfocado en lograr que Argentina realice cambios económicos que frenen la inflación y aumente los ingresos fiscales y mejore el gasto público.
“El Fondo Monetario reconoce que el programa que se está elaborando, después de que haber llegado a un entendimiento inicial la semana pasada, necesita un apoyo más amplio de la sociedad que el programa que colapsó en 2018", subrayó la titular del Fondo, en alusión al rol que protagonizará el Congreso. La economista afirmó que un programa de estas características “ayudaría a la nación a evitar un deterioro económico aún peor y un aumento de la pobreza mientras lucha contra la inflación que supera el 50%”.
Otro punto central y que genera discordia interna en el Frente de Todos es el de los subsidios estatales al consumo de energía. Sobre esta cuestión, la titular del organismo multilateral de crédito soslayó que en el país esos subsidios han sido “bastante generosos y no solo para los pobres de la Argentina”.
El acuerdo anunciado por el Gobierno implica un nuevo programa de dos años y medio durante el cual el FMI hará revisiones trimestrales de las metas acordadas y desembolsos de dinero que la Argentina utilizará para cancelar el stand by contraído por el gobierno de Mauricio Macri y elevar las reservas. Posteriormente habrá un período de 10 años para cancelar la refinanciación, que finalizaría en 2034.