El juicio por agresiones sexuales que se lleva a cabo en un tribunal de Londres contra el célebre actor estadounidense Kevin Spacey, continuó hoy con la declaración testimonial de una tercera presunta víctima que aseguró haber sufrido desde contactos físicos no consentidos hasta agresiones verbales.
El multipremiado Spacey, conocido por títulos como "House of Cards" y "Belleza americana", entre más, afronta una serie de doce cargos por presuntas agresiones sexuales a cuatro hombres diferentes que tienen ahora entre 30 y 40 años y que se remontan al período de 2001 a 2013, cuando vivía y trabajaba en Londres.
Spacey, de 63 años, fue acusado por primera vez de abuso sexual en Reino Unido hace un año. Las presentaciones incluyen siete cargos de agresión sexual, tres cargos de agresión indecente, un cargo de causar daño a una persona y participar en actividad sexual sin consentimiento, y un cargo por hacer que una persona participe en actividad sexual con penetración sin consentimiento.
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La última actualización de hoy incorporó un nuevo testimonio de una de las víctimas, quien después de su declaración inicial comenzó a ser interrogado en la corte.
Al jurado se le mostró un video de la entrevista policial en el que el denunciante afirma que Spacey agarró con fuerza sus genitales en un incidente "doloroso", "degradante" y "horrible", según consignó la cadena de televisión Sky News.
Según el hombre, Spacey se escudaba en su orientación sexual para justificar sus acciones, causándole tanto daño como los presuntos abusos físicos: "Spacey alegaba que 'cualquier comportamiento inadecuado era porque soy gay'", compartió la víctima, cuya identidad permanece protegida de la audiencia pública.
El demandante lamentó que alguien use su sexualidad "para ocultar y excusar su comportamiento". Explicó además que no habló del abuso inmediatamente debido al ambiente sociocultural de la época.
"Era un ambiente muy diferente, mucho antes del #MeToo. Me habrían considerado un instigador", dijo, añadiendo que "el mundo es muy diferente ahora".
El hombre sugirió que, de haber hablado, se habría convertido en el problema, y aunque si bien no fue forzado ni golpeado, el incidente fue relevante y perturbador.
Por su parte, Patrick Gibbs, abogado defensor de Spacey, propuso que el denunciante podría haber distorsionado los hechos debido a un posible interés en conocer a Spacey. Sin embargo, el hombre negó tales insinuaciones, y afirmó no tener "ningún interés particular, emoción o deseo de conocer" al actor.
Rechazó también las acusaciones del abogado de que estaba intentando "monetizar" la situación, y sostuvo que solo buscaba una disculpa.
La víctima relató detalladamente la supuesta agresión sexual, con una descripción de cómo Spacey lo aprisionó contra la pared con el brazo en su garganta.
"Me puso de espaldas contra la pared y su brazo en mi garganta. Eso fue la maniobra de la cobra", dijo, aludiendo a cuando el actor supuestamente le tocó los genitales. El hombre declaró que el incidente duró unos minutos y lo dejó "extremadamente desconcertado".
Mientras tanto, el abogado defensor argumentó que estos eventos simplemente "no ocurrieron en absoluto", pero el hombre mantuvo firmemente su versión, e insistió en que, aunque "no tenía sentido hacerle eso a alguien", el incidente "ocurrió sin duda alguna".
En cuanto al comportamiento verbal de Spacey, la víctima comparó los insultos del actor con los disparos de una "ametralladora" y describió al actor como "distante", "rudo y despectivo".
El juicio en Inglaterra es el último proceso de una larga lista de denuncias contra Spacey, que inició en 2017 por el testimonio público del actor Anthony Rapp -luego formalizado en una demanda en 2020-, que acusó al doble ganador del premio Oscar de la Academia de Hollywood de haber abusado sexualmente de él cuando era adolescente durante una fiesta en la década de los 80.
Ese fue el disparador de múltiples denuncias de otros hombres que también reportaron haber sido objeto de abuso o de comportamiento inapropiado de Spacey, cuya carrera fue interrumpida de manera abrupta mientras gozaba de gran éxito por su papel principal en la aclamada serie de drama político "House of Cards".
Luego de que los casos tomaran trascendencia, Spacey difundió un comunicado en el que afirmaba no recordar ninguno de los episodios dados a conocer, aunque se disculpó por lo ocurrido.
El actor enfrentó otras denuncias vinculadas con delitos sexuales, entre las que destacan dos procesos judiciales en Nantucket, en el estado de Massachusetts, y otro en Los Ángeles, aunque todavía no fue condenado por ninguno de ellos.
Con información de Télam
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