La canción acerca de "un nombre rojo de piquete"

24 de junio, 2022 | 15.46

Dueño de una obra que esquiva el oportunismo y se aleja del panfleto para, en cambio, entregar testimonios sensibles y certeros, Jorge Fandermole es el autor de “Junio”, cuyo texto es el que sigue:

“Me desperté diciendo esta mañana

No vi las predicciones del espanto

Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

Que le arrancaba al sueño mi palabra

En este invierno que pega tan duro

Está lejos tu boca que me ama

Y se me desdibuja en el futuro

Y junio me arde rojo, aquí en la espalda

En este invierno atroz no hay escenario

Más duro que esta calle de llovizna

Cada uno sigue en ella su calvario

Pero la cruz de todos es la misma

Salí con las razones de la fiebre

Y una tristeza absurda como el hambre

Y cuando en el corazón la sangre hierve

Es de esperar que se derrame sangre

Me llamo con el nombre que me dieron

El que tomó la crónica del día

Soy uno de los dos que ya partieron

Los dos en un montón que resistían

Hermano en la delgada línea roja

Que te me fuiste dos minutos antes

Con la indiscreta muerte que en tu boca

Entraba en cada casa con tu imagen

Yo estaba junto a vos, sobre tu grito

Besándote feroz la indigna muerte

Mientras te ibas volando al infinito

Fulgor de la mañana indiferente

Fulgor de la mañana indiferente

Yo sé que el corazón que está latiendo

En cada uno es una senda pedregosa

Cuando en el suelo sucio me estoy yendo

Ajeno y solo de todas las cosas

Si yo salí por mí y salí por todos

¿Cómo es que ahora no hay nadie aquí a mi lado?

Que me retenga la luz en los ojos

Que contenga este río colorado

El corazón del hombre es una senda

Más áspera que la piedra desnuda

Mi extenso corazón es una ofrenda

Que pierde sangre en esta calle cruda

Yo tengo un nombre rojo de piquete

Y un apellido muerto de 20 años

Y encima las miradas insolentes

De los perros oscuros del cadalso

Yo no llevaba un arma entre las manos

Sino en el franco pecho dolorido

Y el pecho es lo que me vieron armado

Y en el corazón, todos los peligros

La mano que me mata no me llega

Ni al límite más bajo de mi hombría

Aunque me arrastren rojo en las veredas

Con una flor abierta a sangre fría

Hoy necesito un canto piquetero

Que me devuelva la voz silenciada

Que me abra por la noche algún sendero

Pa' que vuelva mi vida enamorada”.

Con información de Télam