(Por Sergio Arboleya, enviado especial).- La tercera noche del 63° Festival Nacional de Folclore de Cosquín -dominada por expresiones musicales de Córdoba y Jujuy y la de mayor convocatoria hasta ahora- tuvo un cierre altamente festivo de la mano de la multirítmica alegría circense de Los Caligaris, que debutaron en el encuentro para el festejo por 25 años de camino.
La numerosa agrupación cordobesa vinculada al cuarteto, el circo y el ska propuso una celebración que excedió a esos géneros y construyó una fiesta poderosa y divertida aunque estrictamente nada folclórica para su primera vez en el escenario Atahualpa Yupanqui.
El conjunto integrado por Martín Pampiglione y Juan Carlos Taleb (en voz y guitarra), Diego Pampiglione (batería), Gabriel Garita Onandía (bajo), Marian Pellegrino y Mariano Baigorria (guitarra), Mauricio Ambrosi y Armando Zurdo Mansilla (percusión), Valentín Scagliola (teclados y acordeón), Agustín Cuadrado (trompeta) y Marcos Ozamis (saxo) mostró las credenciales de su manejo de la escena.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Con rápidos y efectivos números circenses matizando el espectáculo, Los Caligaris pusieron dos pequeñas carpas rojas y amarillas sobre el tablado y contaron con un público entregado a esa dimensión gozosa con narices de payaso luminosas, espuma en aerosol o banderas como la que un niño desplegaba con la frase Antes muerto que dejar de soñar (una de las máximas de la canción "Kilómetros").
Nos llevó 25 años llegar a esta plaza, saludaron tras el inicio de las 2.40 con Todos locos, primera pieza de una nómina de una efectividad quizás montada en una apabullante sencillez que incluyó Nadie es perfecto, Razón y Un chico en el cuerpo de un mayor.
Con un sonido arrollador, impecable y de tracción a sangre, la banda anunció la llegada de nuestros primeros invitados como para emparentarnos con el folclore y subieron el charanguista Pachi Herrera y la cantante sanjuanina Claudia Pirán para Con vos.
Es un placer volver y volver con ellos, confió la vocalista que fue Consagración en 2005, tras lucirse como la gran intérprete que es y antes de que Caligaris arremetiera con dos personales versiones: Viva Córdoba", de Los del Suquía; y Volver, con Carlos Gardel cantando desde la pantalla.
Asado y fernet (con la participación de Los Tekis) y Quiero cumbia fueron otros pasajes sonoros de la noche antes de la despedida, a las 3.45, con el inmenso letrero donde se leyó: Gracias muchas.
Antes de Los Caligaris y con un similar clima lúdico y carnavelero, los jujeños de Los Tekis concretaron su 31° presencia en el Festival con un celebrado show con una sorprendente e inusual cantidad de pistas pregrabadas.
Haciendo equilibrio entre un espectáculo de música electrónica norteña y el playback, el quinteto que reúne a Sebastián López (primera voz, quena y charango), Juanjo Pestoni (batería), Mauro Coletti (vientos), Pipo Valdez (vientos y charango), Walter Sader (guitarra) y Pucho Ponce (bajo) agitó a la audiencia casi sin necesidad de tocar en vivo, lo que puede llevar a preguntarse si Cosquín tomará otros rumbos sonoros ya que la propuesta aportó su potente impronta a una velada volcada al bullicio.
El rito de pelotas gigantes con el nombre de uno de los auspiciantes del evento, espuma y papel picado se desarrolló en medio de un singular set que comenzó con "Todos nos vamos a morir igual" e incluyó Llorar, Llorar, Llorar, Hasta el otro carnaval, Soltame Carnaval y, en los bises, "El humahuaqueño" y "Pena de amor".
El broche que reunió a estas dos bandas de cuño cercano -aunque los locales y debutantes efectivamente tocan y cantan- se dio en el marco de una programación donde también confluyeron las delegaciones provinciales de Jujuy y Córdoba y que quedó a años luz de los espacios de recogimiento, reflexión y silencio que regalaron Jairo-Juan Falú-Lavandera en la apertura y el centenario de Hamlet Lima Quintana el domingo, dos momentos excepcionales en varios sentidos.
Con inicio a cargo de Facundo Toro, fue su continuadora en el escenario la vientista, cantante y autora norteña Micaela Chauque, quien mejor procuró reunir las vertientes de raíz y estridencia que dominaron la grilla, con claro predominio del segundo elemento.
Acompañada por un eficaz grupo y con coreografías a cargo de cuerpos de baile llegados desde Abra Pampa y La Quiaca, la oriunda de Iruya (Salta) y radicada desde pequeña en Tilcara (Jujuy) tuvo un comienzo enérgico e instrumental para enseguida recibir al cantante Antonio Olarte con quien compuso y compartió Tinku de paz.
Gracias por esos aplausos y por el apoyo de siempre del público, saludó antes de entonar, caja en mano, Corazón jornalero con el que llamó a la conservación de los montes nativos.
Para coronar su actuación, la ejecutante de quenas, flautas y sikuris propuso "Carnaval de antaño" mientras decenas de bailarinas ocupaban el inmenso espacio escénico.
Ese mismo espíritu se continuó en la delegación jujeña que tuvo una destacada apertura con piezas de exaltación femenina autóctona con Jujuy mujer (a Barbarita Cruz), Zamba de Lozano (a Yolanda Pérez) y Juana Azurduy, mientras se habilitaba el ingreso a personas con remeras negras con las inscripciones Gobierno de Jujuy. Unión, paz y trabajo.
Tal vez para equiparar ese auge jujeño, centenares de enseñas cordobesas de plástico se repartieron en las plateas y acompañaron la presentación de los locales Ceibo, quienes en el mediodía del domingo allí mismo participaron de una versión de la Misa Criolla junto al coro municipal con entrada gratuita.
A la medianoche fue el turno de La Charo, quien tuvo un ingreso de peso y despliegue escénico desde Formosa y desde Chaco con un saludito con Agüita de manantial, tal como lo verbalizó, pero su propuesta fue perdiendo consistencia.
Con una marcada y machacante base electrónica en manos del avezado Gaby Kerpel, la también actriz que integra el elenco de Sex en Villa Carlos Paz, apostó a las cumbias (como Pajarito y Sobre tu playa, esta última de Inti Illimani) pero ese rumbo sonoro de algún modo las igualó, por caso, con Malambeo.
Luciendo al principio una vincha de plumas de homenaje a nuestros pueblos originarios como mujer guaraní que soy, según expresó, remató su set con una peculiar visita a Celador de sueños (del dúo mendocino Orozco-Barrientos) que hasta incorporó un fragmento con la voz de Mercedes Sosa.
Después de los salteños Guitarreros, la delegación cordobesa combinó en su participación un homenaje a Ica Novo (con Del norte cordobés) y hacia el final sumó las voces de las destacadas Mery Murúa y Paola Bernal mientras las banderas locales flameaban de nuevo para recibir a otro crédito provincial como Pachecos.
Para esta noche, con un pronóstico de lluvias que se iniciarían desde la primera tarde, figuran Luis SalinasLito Vitale; María Fernanda Juárez; Carolina Del Carmen Peleritti; Horacio Banegas; Oiga Orquesta; Milena Salamanca; Los Alonsitos; Bruno Arias; y Dúo Coplanacu.
La grilla del miércoles, con la confirmada ausencia de Los Nocheros por el grave estado de salud de una familiar, tendrá a Destino San Javier, Bruja Salguero, Antonio Tarrago Ros, Gabriel Macías y Ahyre.
Con información de Télam