"Hacia afuera blanco": un drama familiar en las relaciones padre-hija de la posdictadura

27 de septiembre, 2023 | 16.29

La íntima historia de una mujer y su padre se entreteje en una isla del Delta, mientras dialogan sobre la hermana de él, detenida desaparecida, junto a la historia familiar en "Hacia afuera blanco", nuevo filme de Sofía Ungar, que se estrena este jueves en el cine Gaumont.

"La idea es una combinación de mi obsesión infantil por descubrir quién era Choli (la tía, Elena María Ungar), y el deseo en mi juventud de inventar un mecanismo para vincularme con mi padre", dijo a Télam la directora.

Para el relato, Ungar se apoya en su profesión de fotógrafa para darle quietud al video y dejar ingresar al lente sensaciones y sonidos que son capturados en la soledad de la naturaleza. Se escucha el murmullo del río, el piar de los pájaros y el rugido del viento, mientras padre e hija se encuentran.

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"El rodaje fue en etapas, durante muchos años. Al comienzo viajaba yo sola a la isla con una cámara, sin ningún plan. Fue la parte más ardua. No entendía qué o cómo filmarlo. Al final, cuando comencé a trabajar con la directora de fotografía, que fue también asistente de dirección, entendí que tenía que armar escenas", señaló la realizadora de "Shalom Bombón".

"Cuando empecé a pensar en hacer esta película -agregó- estaba leyendo 'Los espantos', de Silvia Schwarzbock, y me sorprendió muchísimo. Esta idea que tras la dictadura, tras los campos, la democracia postdictatorial es la vida de la postderrota, la vida de derecha. Con esta idea y otras que se tratan en el libro observé mi infancia en los 90, y a mi familia bajo una nueva luz. Había cosas (espantos) que yo veía pero que no sabía nombrar".

La directora indaga en un pasado que su padre por momentos pretende olvidar, aunque también quiere sacarlo a flote para que no se pierda la historia familiar. Y, además, es una manera de mantener el contacto con su hija en una película donde el silencio es preponderante y, sin llegar a ser incómodo, plantea la realidad que atraviesa a ambos y al entorno.

"Cuando filmaba esta película muchas veces se me cuestionó (incluso desde un entorno progre bienpensante) por qué hacer otra película argentina sobre la dictadura. Yo tenía la intuición de que habían pistas muy sutiles en el presente, a las que tenía que prestarles atención. El consenso social que existió durante el rodaje, ahora está amenazado", reflexionó Ungar.

Con información de Télam