La represa Jorge Cepernic, en construcción en la provincia de Santa Cruz junto con la represa Néstor Kirchner, sufrió una inundación en el sector donde se ubica la casa de máquinas. Es importante recordar que, a finales de junio, un severo temporal invernal azotó la zona, generando complicaciones operativas y acumulación de nieve. El sábado 10 de agosto, un aumento sustancial de la temperatura provocó el deshielo de la nieve aún presente. El agua resultante del derretimiento escurrió hacia los sectores más profundos de la obra.
Los problemas en la represa se produce en una obra virtualmente abandonada que al encontrarse en esta situación no pudo atender la necesidad operativa y técnica inmediata que se hubiera requerido para mitigar el evento. En primer lugar, la contratista desmovilizó unilateralmente los obradores de ambas represas en diciembre de 2023. Tres meses después, avanzó con el despido de todo su personal, dejando solo a 50 personas encargadas del mantenimiento mínimo de los obradores y del cuidado de las dos obras, que están a unos 60 km de distancia entre sí.
Desde principios de año, las negociaciones contractuales entre la contratista y el comitente Enarsa para firmar la Adenda XII al contrato se encuentran estancadas. El objetivo de esta Adenda es reactivar la obra, implementando un programa de trabajos ajustado, y resolviendo temas contractuales pendientes. Finalmente, no se han concretado las gestiones para solicitar fondos al consorcio de bancos chinos que actúan como prestamistas para este proyecto. Fondos necesarios a fin de inyectar liquidez a la obra.
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La situación descripta de desatención provoca que diversas contingencias típicas de la zona donde se construyen las obras escalen a magnitudes mayores, tal como se observa actualmente. Esto, a su vez, genera mayores complicaciones para la reactivación de la obras y la certeza de contar con fechas para la puesta en marcha de las centrales.
La combinación de deshielos acelerados y fuertes lluvias de los últimos días causó problemas en la represa Jorge Cepernic, situada en el río Santa Cruz. El caudal superó la capacidad del vertedero principal, provocando inundaciones que detuvieron la construcción de la central hidroeléctrica.
Desde mayo hasta hace unas semanas, las intensas nevadas dieron paso a un deshielo que generó grandes caudales de agua, aluviones, que fluyeron hacia el río Santa Cruz y atravesaron la zona de obras. A pesar de las medidas adoptadas para canalizar las escorrentías, esta situación extraordinaria, que atraviesa actividades en toda la provincia, manteniendo en alerta diversas localidades, incluida la capital provincial, resultó en la entrada de agua en las zonas de construcción de la casa de máquinas y el vertedero.
Ante esta emergencia, la Unión Transitoria de Empresas (UTE) Represas Patagonia informó que está llevando a cabo desvíos, contención y bombeo para normalizar la situación, logrando neutralizar hoy el ingreso de agua en las mencionadas estructuras de hormigón. Se precisó que las primeras evaluaciones no muestran daños significativos en las estructuras. “Cuando el aprovechamiento se encuentre en funcionamiento, todas las estructuras afectadas, se encontrarán sumergidas bajo el agua del lago”, cerró el comunicado.