Este lunes se confirmó que el gobierno nacional dejará de subsidiar el boleto integrado a la Red SUBE en los colectivos que circulan entre en la Provincia y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, lo que supone un aumento de la tarifa de hasta 60 por ciento. Las empresas de colectivos alertaron en un comunicado que evalúan dejar de brindar el servicio de colectivos debido a la falta de acuerdo por la quita de subsidios que promueve la administración de Javier Milei. Las firmas denuncian que la administración nacional quita los subsidios y por otra parte impide la suba de las tarifas para trasladar los costos. Además, anticipan que se reducirá el uso del servicio, incrementando el costo por pasajero.
Distintas estimaciones sobre el consumo interno advierten que uno de los servicios que no logra recuperarse de la recesión es el de transporte. Pese a la leve mejora general del consumo interno, el capítulo de transporte y vehículos mostró una baja de 8,9 por ciento interanual en julio, según la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), que la justifica en una “gran contracción en el ingreso real de los hogares, y una disminución en el consumo de nafta”. Por su parte, datos divulgados por la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) dan cuenta que la cantidad de pasajeros promedio de los colectivos en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) en los primeros días de agosto descendió un 5 por ciento frente al mismo período de 2023, de 10.226.719 pasajeros al 18 de agosto del 2023 a 9.686.761 en la actualidad.
En un bolsillo ya castigado de los hogares por el incremento de las tarifas y los servicios, vis a vis con una inflación en alimentos y bienes de primera necesidad que no cede, el Gobierno confirmó que eliminará el subsidio al servicio integral de pasajeros en el AMBA. Hasta ahora, el beneficio se aplicaba de forma automática en el momento del viaje solo para las tarjetas registradas, generando que el primer viaje se pague con tarifa plena, el segundo con un descuento del 50 por ciento y el tercero con 75 por ciento de rebaja. Esta decisión significará un nuevo impacto al bolsillo de los usuarios de transporte público porque todos los tramos se abonarán a tarifa plena.
En un comunicado firmado la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), la Cámara Empresaria del Autotransporte de Pasajeros (CEAP), la Cámara de Transporte de la Provincia de Buenos de Buenos Aires (CTPBA) y la Cámara de Empresarios Unidos del Transporte Urbano de Pasajeros de Buenos Aires (CEUTUPBA), las compañías alertan por un cese de actividades. Las empresas solicitan “cobertura RED SUBE para aquellas líneas que no son Jurisdicción Nacional y recorren el AMBA”, denuncia “falta de Actualización de la Estructura de Costo utilizada para calcular Subsidios” y advierten que existe una subestimación en el “cálculo de subsidios de costo de inversión en coches (una brecha mayor a 100 por ciento)”.
SUBE el boleto, BAJA la uso
La eliminación del subsidio el boleto integrado provocará un nuevo descenso en el uso de este servicio, lo que aumentará los costos por unidad (por menor cantidad de personas transportadas), luego de que el 12 de agosto se había ajustado el pasaje en un 37 por ciento.
La intervención oficial en los precios, regulando el “largo de la soga” que se da a productos y servicios, no está dando resultados para mostrar una desaceleración inflacionaria. Los alimentos siguen en alza y los constantes ajustes tarifarios empujan a reducir su uso. El último informe de la Cámara de Comercio destaca que en julio el consumo registró un alza de 1,8 por ciento con relación a junio, mientras que disminuyó 5,6 por ciento en forma interanual, lo que significó una desaceleración en el ritmo de caída. En los primeros siete meses del año exhibe una contracción de 6,2 por ciento interanual en línea con el deterioro en el consumo experimentado desde inicios del año.
“La dinámica que tendrán las tarifas y los subsidios a los servicios públicos será fundamental para que la inflación no vuelva a acelerarse y repercuta de forma negativa en el consumo", explica la Cámara. El capítulo de transporte y vehículos evidencia una baja de 8,9 por ciento interanual en julio. Desde AAETA informaron que la cantidad de pasajeros transportados en subtes y colectivos experimentó una fuerte caída de hasta el 24 por ciento en el último año, mientras que una porción de esa baja fue compensada por el ferrocarril, aunque en forma leve, con un alza del 4,2 por ciento.
La caída en el uso del resto de los medios de transporte obedece a una combinación de crisis económica, aumentos de tarifas y la generalización del home office como modalidad de trabajo pos-pandemia, explican en el sector. La caída en el uso del transporte público va en paralelo al nivel de actividad económica. La Asociación reveló además que en la tercera semana de agosto, después del aumento del 37,5 por ciento en las tarifas, hubo un "ligero" incremento en la cantidad de pasajeros transportados por día con relación a la semana anterior, por lo cual "no se verifica un impacto negativo" esta vez.
El boleto de colectivos subió 600 por ciento (se multiplicó por siete en siete meses). Además, el Gobierno anunció que desde septiembre dejará de subsidiar a las 31 líneas de colectivos que operan solamente en la Ciudad de Buenos Aires y también dará de baja el "boleto integrado" o "red SUBE", que permite acumular descuentos en las tarifas al hacer un segundo o tercer viaje dentro de las 2 horas de iniciado el ciclo. Las empresas prevén que el servicio se verá resentido en la medida en que los usuarios puedan conseguir que sus empleadores reconozcan en los acuerdos salariales este incremento de los “viáticos”, mientras el Gobierno busca, en paralelo, imponer un tope a las paritarias.
Costos en el AMBA
El gasto en transporte público será mayor en septiembre ante igual cuadro tarifario. Eso se debe a que en agosto el aumento se efectivizó a partir del día 12 y por lo tanto el gasto refleja doce días con la tarifa anterior y diecinueve con el valor actual del boleto, advierte un informe del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP), un organismo de doble dependencia (UBA y CONICET) .
El documento explica que la determinación de los subsidios al transporte público automotor se realiza a partir de la diferencia entre los ingresos tarifarios proyectados y los costos estimados para el período. El Observatorio de Tarifas y Subsidios del IIEP elaboró un índice con el objetivo de dimensionar la evolución de los costos del transporte público automotor del AMBA, expresando su valor en función de la cantidad de pasajeros transportados.
Al mes de junio el costo técnico por pasajero fue de 1.132 pesos sin impuestos (ascendería a 1250 pesos considerando el IVA del 10,5 por ciento adicional) mientras que para la Secretaría de Transporte el costo regulado fue de 754 pesos. Entre los ítems que componen el índice, las diferencias más significativas se observan en el precio imputado al parque móvil en operación y en la tasa de retribución al capital.
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"En particular, se observa que esta última se sitúa muy por debajo a la tasa empleada para sistemas comparables de América del Sur y de lo que debiera corresponder al contexto macroeconómico local", señala el informe. El Gobierno Nacional anunció la decisión de avanzar con una nueva quita a los subsidios al transporte público automotor del AMBA. Esta medida sería efectiva a partir del mes de septiembre.
La operación puede desagregarse en dos conceptos: a) la cesión a CABA del pago del 100 por ciento de los subsidios a la oferta, de los cuales la Ciudad abona el 55 por ciento; b) la cesión del pago del subsidio por tarifa integrada a CABA y a la Provincia de Buenos Aires cuando se trate de líneas con recorrido exclusivo dentro de su jurisdicción. Desde el año 2019, la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires son responsables por el pago de las compensaciones a la oferta del servicio de transporte automotor, entendiéndose a estas como aquellas que no se corresponden con un uso o atributo de la demanda como es la tarifa social y el boleto integrado. Por su parte, el Estado Nacional abona las compensaciones correspondientes a las líneas interjurisdiccionales con recorrido entre CABA y la Provincia.
Al mes de junio, la liquidación mensual de subsidios a los colectivos del AMBA asciende a 155.361 millones de pesos de los cuales Nación aporta el 55 por ciento, la Ciudad de Buenos Aires el 5 por ciento y Provincia el 40 por ciento restante. El traspaso del resto de las compensaciones a la oferta supondrá para la Ciudad un gasto incremental de 5.725 millones de pesos. Asimismo, el traspaso del boleto integrado implicaría un ahorro fiscal para Nación de 705 millones de pesos para las líneas con recorrido exclusivo en la Ciudad y de 3.794 millones para las líneas de la Provincia.