El Gobierno impuso la tregua obligatoria por 15 días y fijó audiencia para el martes 30 a las 11, donde participarán las organizaciones gremiales, empresarios y funcionarios de la cartera laboral. La Federación de Sanidad (Fatsa) había dispuesto paros de 3 horas por turnos para este viernes e iba a debatir el sábado una huelga de 24 horas.
Desde la mañana y avanzada la tarde los paros tuvieron adhesión de los trabajadores de todo el país como lo reseñaron desde Fatsa y Atsa, recalcando en ocasión que el reclamo salarial está cifrado en la Paritaria 2020, bajo la aseveración de que "los trabajadores sanitarios en pandemia, cada vez trabajamos más y cobramos menos" desde el gremio.
"El objetivo primordial de dicho procedimiento no sólo es tratar de avenir a las partes para que lleguen a un acuerdo que solucione el conflicto de origen sino, y, en primer término, garantizar la paz social atendiendo a la necesidad pública de contrarrestar eventuales desbordes que pudieran suscitar las acciones de las partes", argumentó la resolución del Ministerio de Trabajo.
"Los trabajadores de Sanidad damos todo desde el primer día de la pandemia y nuestros salarios siguen desactualizados. Unidos vamos a lograr que se visibilice y se escuche nuestro legítimo reclamo. Exigimos una recomposición salarial inmediata. Paramos 3 horas por turno", habían indicado desde la cuenta del Sindicato de Trabajadores de la Sanidad Argentina, filial Buenos Aires.
Las medidas sindicales se adoptan luego de que fracasaran las negociaciones paritarias, en el marco de las cuales los gremialistas pidieron un aumento del 16% a partir del mes de abril, algo que fue rechazado por las autoridades de la Federación Argentina de Prestadores de Salud (FAPS).