Después de 11 meses en caída, el empleo volvió a crecer. La información del Sistema Integrado Previsional Argentino muestra que, en agosto, el empleo asalariado registrado privado creció en la comparación intermensual por primera vez después de una fase contractiva que se extendió desde la asunción de Javier Milei. Sin embargo, el monotributo siguió al alza y es uno de los factores que explican que la desocupación no sea aún mayor.
En comparación con noviembre del año pasado, el retroceso sigue siendo importante: perdieron su puesto 182.674 trabajadores. Pero la variación mensual empieza a dar positiva. En agosto habían dejado de caer y en septiembre se sumaron 8.838 trabajadores nuevos. Según el panorama mensual del trabajo registrado que difundió la Secretaría de Trabajo, desde una mirada sectorial, la modificación de la dinámica del empleo formal privado verificado en agosto y septiembre "obedece, fundamentalmente, al cambio en el comportamiento de tres sectores muy importantes por su incidencia en el total del empleo asalariado registrado privado: construcción, industria y comercio".
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"En septiembre también se verificó una expansión del empleo asalariado registrado del sector privado no agrícola en empresas de más de diez personas ocupadas, localizadas en los principales aglomerados urbanos. De este modo, en agosto y septiembre no sólo se interrumpe la fase contractiva del empleo registrado tanto en el ámbito nacional como en los principales centros urbanos del país, sino que se reconocen signos de una recuperación incipiente de los puestos de trabajo formales perdidos entre septiembre de 2023 y julio de 2024", remarcó el documento. Esta variación positiva representa la incorporación de cerca de cuatro mil puestos de trabajo asalariados formales del sector privado e interrumpe la fase contractiva iniciada en septiembre de 2023, durante la cual se desvincularon alrededor de 177 mil trabajadores -en términos netos- del empleo formal privado (3% del total del empleo formal privado correspondiente a agosto de 2023).
La expansión del empleo en septiembre si bien se observa en todos los aglomerados, cobra especial relevancia en el interior del país. Mientras que en el aglomerado del Gran Buenos Aires se observó un crecimiento de 0,1%, en el conjunto de los aglomerados del interior del país el aumento del empleo en empresas privadas de diez y más personas ocupadas asciende al 0,5% en relación al mes anterior.
A nivel sectorial, el empuje lo dieron el comercio y la construcción. Pero lo más llamativo es que la industria no se quedó atrás: a pesar de ser incipiente, en los últimos dos meses se sumaron 2.313 trabajadores nuevos.
La información proveniente del SIPA y de la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) coincidieron en que la construcción y la industria, dos sectores que concentraron la caída del empleo asalariado formal durante la fase contractiva muestran ahora, estabilidad en el caso del empleo en la Industria (0% en agosto de acuerdo al SIPA y 0,1% en septiembre según EIL) y crecimiento neto del empleo en el caso de la construcción (0,3% en agosto de acuerdo al SIPA y de 1,4% en septiembre según EIL). La tercer actividad que impulsó la recuperación de los puestos de trabajo formales privados en agosto y septiembre es el comercio que se mantenía estable desde abril y muestra un crecimiento del 0,3% en agosto (según SIPA) y del 0,5% en septiembre (según EIL).
Respecto los salarios, la remuneración real en el sector privado registrado tuvo un leve recorte y empieza a estabilizarse en los niveles previos a la devaluación de diciembre. Aún así, sigue 1,5% debajo de noviembre y 5,1% abajo del pico de 2023. En comparación a diciembre de 2015, el sueldo sigue casi un 20% abajo.
La contracara
La contracara del informe publicado por el Gobierno es el trabajo por cuenta propia. Los monotributistas volvieron a crecer a paso firme, tanto los plenos como los sociales y en septiembre representaban el 21% de los ocupados registrados. En 2012 no llegaban al 14%. En cuanto a las trabajadoras en casas particulares, siguen siendo las más golpeadas en el corto, mediano y largo plazo. No para la sangría y en términos absolutos se encuentran en niveles similares a los de 2013.
El sector privado sigue siendo el más castigado en el acumulado. Contra noviembre se contabilizan 129.780 trabajadores menos. Pero también es el que más creció en los últimos dos meses: se sumaron 12.934 trabajadores. En términos absolutos, el indicador laboral todavía permanece debajo de septiembre de 2015.
En paralelo, el sector público parece haberse estancado hace cuatro meses. Si es cierto que la "motosierra" sigue enfilada como símbolo de al ajuste, o no tiene una magnitud tan relevante o está siendo compensado por un aumento a nivel provincial y/o municipal.
Los datos de octubre parecen confirmar el leve repunte del empleo. La EIL tuvo un aumento del 0,32% -el más alto para un mes de octubre desde 2017- y las suspensiones volvieron a bajar fuerte.
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