Diciembre es el mes del aguinaldo y en esta fecha se cumplen 75 años de su implementación. Una situación que es normal para todo trabajador nacido después de 1945. ¿Por qué se cobra? ¿Desde cuándo? ¿Es un legado de Juan Domingo Perón? ¿Es un triunfo del peronismo? Esta es la historia.
El aguinaldo se logró tras una larga lucha de los trabajadores argentinos y una promesa de Perón antes del histórico 17 de octubre. El Sueldo Anual Complementario fue creado por decreto el 20 de diciembre de 1945, bajo el gobierno del General Edelmiro Farrell (el golpe fue el 4 de junio de 1943).
Antecedentes en Argentina
Si bien el aguinaldo se instauró en 1945, este beneficio ya tenía antecedentes formales en la Argentina. Por ejemplo, en 1910, el gobierno municipal de Buenos Aires pagó a sus empleados una bonificación de un mes extra de sueldo. Lo llamaron “Aguinaldo Centenario”.
En 1924 en la provincia de Jujuy, bajo el gobierno de Benjamín Villafañe, también se realizó este pago especial, para el personal de servicio y ordenanzas de la administración. Se les asignaba medio mes de sueldo, imputando el gasto a Rentas Generales. Décadas más tarde se impondría de manera formal.
El 8 de octubre de 1945 Perón fue forzado a renunciar a su cargo como Secretario de Trabajo y Previsión. El 10 dio un discurso memorable a miles de trabajadores.
"También dejo firmado un decreto de una importancia extraordinaria para los trabajadores. Es el que se refiere al aumento de sueldos y salarios, implantación del salario móvil, vital y básico, y la participación en las ganancias", afirmó en ese discurso. Y dos días después (el 12 de octubre) sería detenido.
Dos meses después, se promulgó el decreto N° 33.302/45 que no solo estableció el aguinaldo sino también las vacaciones pagas e indemnización por despido injustificado. También, se creó el Instituto Nacional de Remuneración que, entre otras funciones, tenía la de fijar el salario mínimo.
Los trabajadores siguieron luchando para la aplicación del decreto por la resistencia de empresarios y patrones. Fue una época de disputas, fuertes choques entre trabajadores y patrones durante meses. Incluso, los empresarios paralizaron el país a comienzos de 1946.
En febrero de 1946, se llevaron a cabo elecciones presidenciales. La fórmula Perón - Hortensio Quijano, por el Partido Laborista, se impuso en las urnas sobre la de José Tamborini y Enrique Mosca, de la Unión Democrática. Con Perón al frente del país, la promesa de reivindicaciones laborales más justas se materializó: el aguinaldo fue ratificado por la Ley Nº12.921, el 20 de diciembre de 1946.
El impacto económico del aguinaldo
Con mejor o peor suerte para la dinámica económica del país, el cobro del aguinaldo siempre representó una rueda de auxilio para los trabajadores. Es que el cobro de diciembre coincide con las fiestas de fin de año y las vacaciones, por lo cual un ingreso extra representa una suba de ingresos extraordinaria.
Si pensamos en el tiempo reciente, el SAC también se vio afectado por la pandemia del coronavirus. En 2020, el 70% de las empresas argentinas no pudo pagar el aguinaldo a sus empleados. El alarmante dato se desprende de los cálculos de la Confederación Empresaria de la República Argentina (CGERA) y hace hincapié sobre todo en las PyMEs. Las restricciones por la cuarentena y la baja en la producción y el consumo provocó que muchos empresarios no pudieran hacer frente al salario complementario.
Las Pymes tuvieron serias dificultades para poder pagar el aguinaldo y apenas el 20% pudo hacerlo de manera completa. Además, la dinámica se repitió en el abono de salarios durante el peor momento de la crisis del año pasado: menos del 60% de las empresas depositó el sueldo de forma total.
Por las restricciones a la actividad producto de la pandemia y la falta de financiamiento, el 50% de las pequeñas y medianas empresas no pagaron el Sueldo Anual Complementario. Así lo reveló la Asociación de Empresarios Nacionales (ENAC), que indicó que el 30% lo hizo en cuotas y un escaso 20% logró abonarlo en tiempo y forma.
Sin embargo, el panorama cambió este año. Según el mismo ente que agrupa a las pymes, este cierre de año se ve marcado por el curso de pago normal, debido a "la reactivación y el crédito", apuntaron fuentes de ENAC.
El último dato que ofreció el Indec sobre la inflación de noviembre confirma la tendencia alcista de los salarios en el último tramo del año. Los gremios cerraron la tercera etapa de negociaciones paritarias con números que bordean y superan el 50%, lo cual permite prever una leve recuperación del poder adquisitivo de la remuneración en el sector formal.
Cabe recordar que el Ministerio de Trabajo viene de publicar el informe de la RIPTE (Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables) de octubre y creció 3,6% respecto a septiembre. Se trató de otro mes en que los salarios le ganaron a la inflación (3,5%). En los primeros 10 meses del año, la RIPTE creció 4,1 puntos porcentuales más que el Indice de precios al consumidor.
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