El ministro de Economía y candidato a Presidente en estas elecciones 2023, Sergio Massa, anunció un paquete de medidas de estímulo a la demanda y de refuerzo a los ingresos para amortizar los efectos de la devaluación post PASO. Las medidas de ingreso implican volcar más de 943.579 millones de pesos a la economía, de los cuales el esfuerzo fiscal representa 718.579 millones de pesos (el 76,3 por ciento del total), según un breve informe realizado por el Centro de Investigación y Formación de la CTA (CIFRA). El Gobierno proyecta que el costo fiscal neto será de entre 270 y 290 mil millones de pesos.
La batería de medidas, que desde el Gobierno aseguran no haber consultado con el Fondo Monetario, se encuentra aún en los márgenes que el organismo que conduce Kristalina Georgieva tenía apalabrado con el equipo económico, otorgándole cierto grado de autonomía en la aplicación de políticas sin que eso implica salirse de la senda pactada.
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“Para alcanzar el déficit fiscal primario acordado de 1,9 por ciento del PIB este año sigue siendo esencial apoyar la estabilidad económica y financiera. Los esfuerzos se centran en reforzar los controles de gasto con medidas iniciales dirigidas a actualizar las tarifas de la energía y contener los salarios públicos y las pensiones, sin dejar de proteger el gasto prioritario en programas sociales y en infraestructura”, señala el staff report del FMI.
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De acuerdo con el informe de la CIFRA-CTA, el total de recursos que se pone a disposición –tanto desde el sector privado como público—asciende a 0,53 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), de los cuales el costo fiscal que asume el Gobierno es de 0,4 por ciento. Por ejemplo, el 33,7 por ciento del total de recursos orientados a los asalariados del sector privado son financiados con recursos públicos.
Si bien el volumen de recursos puestos a disposición le meterá presión al déficit primario de este año, desde el equipo económico se espera que la mayor recaudación por retenciones derivada de una mayor exportación de soja y por mejora en el consumo permitiría recuperar unos 450 mil millones de pesos, lo que dejaría un costo nominal real de alrededor de 270 mil millones de pesos.
Costo y beneficiarios por medida
Jubilaciones y pensiones. El Gobierno redefinió el bono de 27.000 pesos por uno de 37.000 y lanzó una línea de préstamos de hasta 400.000 pesos en 24, 36 o 48 cuotas con tasa subsidiada del 29 por ciento anual. Esto representa un costo fiscal asumido por el Estado en su totalidad de 153.000 pesos, que alcanzará a 5,1 millones de beneficiarios.
Se suma una devolución de IVA de hasta 18.000 pesos, por encima de los 4056 vigentes. Esta medida es más amplia, dado que incluye a los que cobran hasta tres mínimas, alcanzando a 7,8 millones de personas. El costo fiscal asumido por el Estado será de 326.290 millones de pesos.
Trabajadores de casas particulares. El Estado reembolsará el 50 por ciento del refuerzo a los empleadores con ingresos de hasta 1.500.000 pesos mensuales (se estima el 80 por ciento del total). Serán dos sumas fijas no remunerativas de 12.500 pesos a cobrar en septiembre y octubre. Incluye a 424.000 trabajadores de casas particulares, con una erogación 4240 millones de pesos. El costo total de la medida será de 10.600 millones de pesos y el Estado asume 4240 millones.
Empleados del sector privado. Alcanza a 5,5 millones de trabajadores con salarios netos de hasta 400.000 pesos mensuales que cobrarán dos sumas no remunerativas de 30.000 pesos en septiembre y octubre. El Estado asume el costo mediante al pago a cuenta de contribuciones de Micro (100 por ciento) y Pequeñas Empresas (50 por ciento). Según datos de AFIP, las Micro emplean a 1.263.638 y las pequeñas a 1.186.921. El costo de la medida asciende a 330.000 millones de pesos, pero el Estado se hará cargo de 111.360 millones vía beneficios fiscales.
Empleados del sector público. Se trata de un universo de 390.000 personas que también cobrarán los dos bonos de 30.000 pesos. En este caso, el costo estatal asciende a 23.400 millones de pesos.
Tarjeta Alimentar. Se entregará un refuerzo por única vez en dos cuotas mensuales de 10.000 pesos para las familias con un hijo (55 por ciento del padrón según el Ministerio de Desarrollo Social), 17.000 pesos, para hogares con 2 hijos (27 por ciento) y 23.000 pesos para 3 hijos (18 por ciento). Luego se incrementa la tarjeta el 30 por ciento a partir de noviembre respecto a los montos vigentes que son de 17.000, 26.000 y 34.000 pesos respectivamente. La medida alcanza a 2,4 millones de familias y tiene un costo de 66.538 millones de pesos.
Planes Potenciar Trabajo. Se entregarán dos sumas fijas de 10.000 pesos en septiembre y octubre a un universo de 1,3 millones de beneficiarios. Esto implicará un costo de 26.000 millones de pesos.
Monotributistas. Incluye a más de 1,8 millones de beneficiarios incluidos en el sistema bajo las categorías A, B, C y D a los que no les cobrará por seis meses el componente impositivo, junto con la implementación del Monotributo Productivo Préstamos de hasta 4.000.000 pesos. Esto tendrá un costo fiscal estimado 7752 millones de pesos.